La OTAN inicia el debate sobre su papel en el nuevo plan de paz

Pese al plazo de seis días otorgado a los serbobosnios para la retirada de su armamento pesado, la Alianza Atlántica respiraba ayer optimismo. Decidió empezar a discutir el despliegue militar necesario para aplicar el plan de paz.

El Consejo Atlántico (formado por los embajadores de los Dieciséis) expresó ayer un cauto optimismo" sobre el compromiso serbobosnio de retirarse de Sarajevo y "confirmó" el plazo de 72 horas, hasta las diez de la noche de mañana, que les ha sido otorgado para mostrar pruebas sólidas, de que han iniciado la retirada.

Poco antes de ese hora tope se reunirán los mandos militares de la ONU y la OTAN para evaluar si el inicio de la retirada ha sido meramente simbólico o ha demostrado "con evidencia suficiente" la voluntad serbobosnia de completarla. Fuentes de la OTAN consideran que el movimiento de armas pesadas "puede hacerse muy rápidamente", dado el buen tiempo reinante por el momento y que el plazo de seis días es más que suficiente.

La OTAN es, esta vez, optimista. Lo demuestra el que por primera vez desde. tiempo inmemorial el Consejo Atlántico haya decidido actualizar y discutir el dispositivo militar que debe garantizar la puesta en práctica del plan, lo que empezará a hacer la semana próxima. El único plan militar existente a estos efectos (el 4.103, diseñado para la aplicación del plan de paz de Cyrus Vance y David Owen, puesto que el del Grupo de Contacto, que es que ahora se toma como base, no iba acompañado de un programa similar de aplicación) preveía unas necesidades de 50.000 soldados, la mitad de los cuales serían de EE UU.

Todo pendiente

Lo más significativo de las "conversaciones preliminares" celebradas sobre este asunto es la voluntad de la Alianza Atlántica de incorporar a Rusia en un papel destacado, según fuentes de la organización defensiva. Pero casi todo está por discutir: la duración, la financiación, las misiones exactas de los soldados de la OTAN. Se plantea, por ejemplo, si éstos se limitarán a las tareas tradicionales de mantenimiento e imposición de la paz o se ampliarán con la ayuda humanitaria o la interposición entre distintas fuerzas sobre el terreno.Todas estas incógnitas serán resueltas rápidamente, lo más tarde, antes de final de mes", según altas fuentes de la Alianza. "No podemos esperar seis meses a tener listo el plan, sino que debe estar disponible" para el momento de la paz, añadieron. Estas urgencias ponen de relieve, más aún que el "cauto optimismo" expresado en el comunicado oficial, la convicción de que esta vez la paz es posible.