Se retrasa la fusión de Time Warner con el grupo de Ted Turner

¿Se está pasando el arroz en la anunciada compra del grupo de comunicación de Ted Turner por el imperio de Time Warner? A medida que transcurren los días crece la impresión de que esa operación se atasca, aunque nadie cree que se haya roto. Gerald Levin, presidente de Time Warner, se ha reunido en los últimos días con su colega de Tele Communications Incorporated (TCI), John Malone, uno de los accionistas importantes en el grupo de Turner. La negociación se alarga más de lo previsto.

Aunque los protagonistas principales de esta operación son el imprevisible y quijotesco Ted Turner y el propio Gerald Levin, existe un tercer partícipe cuya opinión importa. Se trata de John Malone, presidente de Tele Communications Incorporated (TCI), el principal operador de televisión por cable de Estados Unidos. TCI es el dueño del 21% de las acciones del Turner Broadcaster System (TBS), el grupo de Turner. Y no se puede materializar una fusión como la intentada, si uno de sus accionistas mas importantes se sitúa en contra.Levin ha ofrecido a los propietarios del grupo de Turner alrededor de tres cuartos de acción de Time Warner por cada acción de TBS. El obstáculo es Malone, que no parece satisfecho con esa oferta y que también desea garantías de que los productos del grupo de Turner puedan ser ofrecidos a los clientes de las redes de cable propiedad de TCI.

Pero el acuerdo de compra de TBS, en el que habría un intercambio de acciones por valor de 8.000 millones de dólares (un billón de pesetas), es complicado. Los que conocen bien a Ted Turner no le ven como número dos de nada, ni siquiera del mayor grupo de comunicación del mundo, y pronostican más movimientos.

Por tanto, todavía hay tiempo para que Turner se niegue a cambiar su trono en el imperio de TBS y la cadena CNN por dos asientos en el Consejo de Administración de Time Warner; y para que la compañía General Electric, dueña de la cadena NBC, le ofrezca una fusión que haga realidad el sueño de su vida: estar al frente de una gran cadena de televisión. Consciente de la fuerte personalidad de Turner, Gerald Levin, presidente de Time Warner le ha cuidado al máximo, garantizándole el control directo de su viejo imperio, más la vicepresidencia del nuevo grupo.

Independientemente de que el proyecto se confirme o no, las tremendas fuerzas en favor de la concentración de poder están dibujando un nuevo panorama en el sector audiovisual y del espectáculo.

Piezas en movimiento

La otra gran fusión ya cerrada afecta a Walt Disney, que el 31 de julio pasado compró. Capital Cities, propietaria de la cadena ABC, para formar un grupo con una facturación de 16.500 millones de dólares. Inmediatamente, otras piezas se movieron: Westinghouse Electric lanzó el 1 de agosto una oferta de 5,4 millones de dólares por la CBS, una operación todavía abierta. Dos semanas después, el presidente de Time Warner proponía a Turner que vendiera TBS y se uniera al que sería el primer grupo mundial de comunicación, con ingresos combinados de 18.700 millones de dólares (2,24 billones de pesetas).En caso de que esta última operación llegara a buen puerto, quedarían en un mismo grupo desde Warner Bros, el mayor estudio de cine y televisión de EE UU, a los canales por cable HBO y Showtime, la CNN, los dos estudios de producción de Turner, la distribuidora Cinemax y el notable archivo cinematográfico de Warner y MGM.