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Excelente nivel creativo en el festival de Reading

Más de 50.000 personas acudieron a la convocatoria de la primera jornada

Un ambiente tranquilo y sereno complementa la maestría profesional de los principales grupos de pop y rock alternativo que actúan este fin de semana en el Festival de Reading Inglaterra. Durante su jornada de inauguración, Courtney Love gateó por el escenario, Green Day bromeó con los jóvenes de las primeras filas y Smashing Pumpkins dieron a conocer temas de su próximo disco.

Courtney Love, líder de Hole, se resistía a abandonar el escenario. La viuda de Kurt Cobain pretendía tocar un largo tema de su último trabajo Live Through This en contra del criterio de sus compañeros y de los horarios marcados por la organización.Cinco grupos, incluidos Juliana Hatfieldy Teenage Fanclub, se habían presentado ya ante una audiencia superior a las 50.000 personas. Pero quedaban todavía los americanos Green Day y Smashing Pumpkins por subir al mismo escenario.

Molesta quizás por la inminente pérdida de protagonismo, Love se lanzó con furia a destruir guitarras y parte del equipo de sonido. Entre el revuelo, un bafle cayó sobre su cuerpo, sin causarle daños serios pero obligándole a gatear por el estrado. La cantante continuó con su carga explosiva hasta que dos responsables de seguridad se la llevaron en brazos. "Adiós", dijo al público con una amplia sonrisa.

La aparente agresividad de Love contrasta con el carácter de los quinceañeros que acuden a Reading. La policía practicó una serie de arrestos, por robo y tráfico de drogas, pero el ambiente en general es comedido y sereno. Alistair Walsh, de 16 años, lleva dos horas esperando con calma en la cola de los autógrafos, tras ver la actuación de su formación favorita, Juliana Hatfield. Walsh trabajó durante 12 semanas en la biblioteca de Coleshill, cerca de Birmingham, hasta conseguir las 12.000 pesetas que cuestan las localidades de fin de semana y financiarse el viaje y estancia. Los menos prevenidos, que opten por la reventa, tendrán pagar más de 30.000 pesetas por el lujo de ver a un total de 50 grupos alternativos en suelo británico.

Las estrellas de la jornada entran en acción cada atardecer. El viernes, tras los temas y bromas del trío califomiano Green Day, los Smashing Pumkins arremetieron con fuerza en el escenario principal. Con un combinado de grandes éxitos y unas canciones pegadizas de su próximo doble disco, Mellon Collie and the Infinite Sadness, pocos recordaron el desastre de su anterior intervención.

El segundo día concluyó con las actuaciones de Paul Weller y Björk en el escenario principal y de Echobelly y Foo Fighters en el secundario. Y hoy se espera con pasión la llegada de Neil Young al principal festival británico de la música alternativa.

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