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Juicio a un falso médico que realizó 2.878 intervenciones quirúrgicas

El acusado no acabó medicina por "terror" a los exámenes

Blanca Cia

Juan Miguel Sánchez Romera estudió cuatro cursos de Medicina, tiempo en el que hizo prácticas en el hospital de la Cruz Roja en l'Hospitalet. En 1979 fue contratado por ese centro con el, convencimiento de que ya era titulado. No lo era, pero el acusado lo ocultó durante años. El falso médico realizó 2.878 intervenciones y algunas tuvieron pésimas consecuencias para los pacientes. Después de 10 años di ejercer, ayer se sentó en el banquillo con una petición de 11 años de cárcel.

El acusado quiso convencer ayer de que no tuvo valor de aclarar la confusión en la Cruz Roja. "Desde siempre quise ser médico", manifestó Sánchez Romera al tribunal de la sección novena de la Audiencia de Barcelona, donde fue juzgado, ayer bajo las, acusaciones de intrusismo, falsificación de documento oficial e imprudencia médica. A continuación, subrayó que lo que le gustaba era el ejercicio de la profesión pero que pasaba muchas dificultades para superar los exámenes. Después de unos cuatro años de hacer de "mirón" en la Cruz Roja de l'Hospitalet y de prácticas en el servicio de otorrinolaringología, Sánchez Romera se fue a cumplir el servicio militar. A la Vuelta, en 1979, los facultativos de la Cruz Roja le ofrecieron la posibilidad de trabajar y el acusado, según reconoció, no tuvo el valor de decirles que no había acabado la carrera.A partir de ahí comenzó la simulación. En el DNI como profesión figuraba la de médico y obré como tal: pasaba consulta, prescribía fármacos y realizaba operaciones y usurpó un número, de colegiado, el 11.831. El acusado manifestó que no le asustaba operar porque "tenía mucha práctica".Así estuvo hasta 1987, cuando algunos de los pacientes intervenidos por Sánchez Romera tuvieron problemas. El caso más serio fue el de Antonio García Rodríguez al que operó de pólipos en la nariz. Según un perito, en la intervención se lesionó un nervio óptico del paciente que desde entonces sufre ceguera irreversible en el ojo derecho.

Otro enfermo, Federico Fernández, no consigue ingerir líquidos de una forma normal. También fue operado de pólipos y ahora tiene comunicada la cavidad bucal con la nasal de forma que. los líquidos le salen por la nariz. "Desde entonces como solo porque me da vergüenza que me vean", dijo.

La relación laboral del falso médico con la Cruz Roja duró hasta 1987. "Había llegado un momento en el que no podía aguantar la situación y tenía miedo al rechazo si decía la verdad", explicó el acusado.

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Sobre la firma

Blanca Cia
Redactora de la edición de EL PAÍS de Cataluña, en la que ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en diferentes secciones, entre ellas información judicial, local, cultural y política. Licenciada en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona.

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