El PP acusa a González de mentir, "como hizo en el 'caso- Cesid"

El Partido Popular acusó ayer a Felipe González de mentir cuando niega su implicación en los GAL. El presidente del Gobierno "miente en este asunto, como ya hizo en el caso Cesid y en tantos otros, cuando estaba directamente concernido y dijo, que se había enterado por la prensa y que todo era un montaje conspiratorio", declaró ayer el secretario general del principal partido de la oposición, Francisco Álvarez Cascos. El dirigente del PP consideró que González acudirá al Congreso a dar explicaciones "a remolque de la situación", tras haber cambiado de criterio en menos de 24 horas.

El PP considera que la dimisión es la única salida que le queda al jefe del Ejecutivo, "cuando la mayoría de la ciudadanía está convencida de que está mintiendo", según declaró ayer Álvarez Cascos en una conferencia de prensa. Y porque "no se puede gobernar un país con 23 sumarios abiertos y testimonios que cada día acentúan su responsabilidad", añadió.Para el secretario general del PP, "no es un problema de enfrentar credibilidades de personas, sino de saber si lo que se dice es verosímil a la luz de los hechos, de las pruebas, de los testimonios", y los populares creen que para la mayoría, los argumentos de González lo son cada vez menos. El número dos del partido señaló que González "es un náufrago de la situación" y volvió a pedir la dimisión del presidente del Gobierno, porque la situación es "insostenible".

Para Álvarez Cascos, el intento de atribuir al PP todos los errores que González ha ido acumulando durante su mandato es absurdo y no encuentra ningún eco, porque aunque el partido de José María Aznar hubiera caído en la tentación de participar en una conspiración, cosa que el secretario general negó de forma tajante, sería imposible que el resultado tuviera la contundencia del caso GAL.

"Ninguna relación"

Álvarez Cascos aseguró que Ricardo García Damborenea no tiene en la actualidad "absolutamente ninguna relación" con su partido y subrayó que el testimonio del ex secretario general de los socialistas de Vizcaya no es un hecho aislado. "Está precedido por los testimonios de Julián Sancristóbal, Francisco Álvarez, Miguel Planchuelo...". Según el dirigente del PP, es la acumulación, y la coincidencia de testimonios lo que pone en entredicho la credibilidad de González.La responsabilidad del jefe del Ejecutivo "es cada día más clara" y su posición sobre los GAL "cada día menos verosímil, como en los escándalos de los fondos reservados y del Cesid". El conjunto de los hechos "obliga a González a no continuar ni un día más en el cargo". "La situación se ha hecho insostenible", remachó Álvarez Cascos. Mantenerla es, en opinión de su partido, inadmisible "en la política española y en la de cualquier país democrático".

Los populares consideran que González se excede en sus facultades al instar al fiscal general del Estado, Carlos Granados, a actuar contra García Damborenea, porque "no es el abogado defensor del Gobierno como éste parece creer".

Sin embargo, Álvarez Cascos dijo que respeta la decisión del presidente del Gobierno, anunciada ayer a los medios de comunicación, de instar a los servicios jurídicos del Estado para que emprendan acciones legales, porque González, como cualquier ciudadano, tiene derecho a defenderse de las acusaciones.

Respecto a la posibilidad de presentar una moción de censura, recordó que su grupo no cuenta con el número de diputados para ganarla, pero reiteró su llamamiento a CiU y al Partido Nacionalista Vasco a sumar los suyos para derrotar al Gobierno.

Álvarez Cascos anunció que será el presidente del PP, José María Aznar, el que dé réplica al jefe del Ejecutivo en el pleno del Congreso del jueves próximo. Por su parte, la portavoz adjunta del Grupo Popular, Loyola de Palacio, dijo que el jefe del Gobierno acude a la Cámara baja "a rastras, porque todos los grupos, incluso CiU, le obligamos a que dé una explicación cabal".