Bohigas y Siza afirman que la arquitectura ha abandonado su voluntad de servicio colectivo
JAVIER SAMPEDRO | Santander
Los agasajos y las togas doctorales no lograron ayer atemperar el discurso incendiario del arquitecto Oriol Bolgas, quien aprovechó su investidura como doctor honoris causa por la Universidad Internacional Menéndez y Pelayo (UIMP) de Santander para lanzar una virulenta invectiva contra los "exabruptos elitistas y escandalosos panfletos propagandísticos" en que, a su juicio, se han convertido las edificaciones con firma de los últimos años.