Los aviones se desvían para verlo
Los pasajeros del vuelo de Lufthansa 2715, entre Colonia y Berlín, en la mañana de ayer, se sorprendieron cuando, a punto de llegar a la capital alemana, el piloto explicó que acababa de solicitar permiso a la torre de control del aeropuerto de Tegel para efectuar una curva que permitiera a los pasajeros contemplar desde el aire el Reichstag recubierto por Christo.Berlín vive una auténtica christomanía. Esta fiebre se manifiesta en un sinfín de exposiciones, instalaciones y acciones paralelas a la cobertura del Reichstag. En una subasta de una pintura original de Christo que muestra el Reichstag recubierto la puja por el cuadro se inició a partir de 80.000 marcos (6,8 millones de pesetas) y al final se adjudicó por 185.000 marcos (15,7 millones). El cuadro lo adquirió el dueño de un hotel.
El gremio de hostelería y similares ha hecho su agosto con Christo. Entre la final de copa y Christo resultaba casi imposible llegar ayer a Berlín. Trenes y aviones estaban repletos y los hoteles atracaban a los desvalidos clientes que buscaban un acomodo en la capital alemana. Pagar 360 marcos por una habitación (30.000 pesetas) sin grandes lujos era lo normal en Berlín.
El histórico edificio ha sido, cómo no, asegurado para cubrir cualquier daño eventual. El precio en que se tasó fue 500 millones de marcos (42.500 millones de pesetas). Una especie de colchones protegen las estatuas y zonas más delicadas del edificio, donde no se emplearon clavos para no dañar las fachadas. Las construcciones de acero en el techo, para sujetar los 100.000 metros cuadrados de material, pesan 285 toneladas. Las pesas del suelo, para la misma finalidad, pesan 100 toneladas. La cuerda de color azul con que se ató la envoltura mide 15.600 metros.
La polémica sobre la importancia artística de la acción de Christo sigue abierta. En tonos triunfales, la presidenta del Parlamento Federal (Bundestag), hasta cierto punto la dueña y señora del edificio recubierto, la democristiana Rita Süssmuth (CDU), se felicitaba la noche del viernes del resultado y afirmaba: "He encontrado a diputados que el día de la votación en el Bundestag se opusieron y habían votado en contra y que ahora se muestran entusiasmados".
Babelia
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