Fauna de salón

Moscas y mosquitos, arañas, cucarachas y hormigas son los invertebrados más combatidos en las casas de Madrid. Pero también puede matarse de un zapatazo un raro escarabajo que jamás se había encontrado en España, el Anthrenus coloratus. Este es el hallazgo más sorprendente del estudio elaborado por entomólogos de la Universidad Complutense en 52 casas madrileñas.Ésta es la primera vez que se realiza una investigación de estas características en el interior de los hogares, según el director del estudio el catedrático de la Universidad Complutense Víctor Montserrat. En las 4.000 trampas colocadas durante un año en 52 viviendas situadas en casi todos los distritos de Madrid se recolectaron 13.500 insectos. Por término medio, se cazaron en cada hogar 258 bichos. De ellos, un 35% eran moscas y mosquistos, y un 25%, ácaros. Se encontraron hormigas y arañas en más del 80% de las casas, y cucarachas, en el 66%.

Los inquilinos más molestos acompañan a los humanos porque se aprovechan de los alimentos, la humedad y el calor de sus hogares. Por eso, además de disfrutar de su salón y cuarto de baño, crían detrás de sus neveras, cocinas y fregaderos. Pero su capacidad de adaptación no está reñida con las nuevas tecnologías: "Son tan versátiles que aparecen hasta en los ordenadores, los vídeos y los microondas", indica Marien Chacón, técnica del centro de insectos de Johnson's Wax Española, empresa que ha financiado el estudio.

Aunque en España los insectos no provocan enfermedades graves como en África, sí transmiten gérmenes. Las moscas se alimentan de sustancias en descomposición (basura, carroña y cadáveres) y después se posan por toda la casa. Las cucarachas contaminan lo que tocan y pueden transmitir la disentería o la salmonelosis. Sin embargo, algunos de estos huéspedes son más benignos: Las arañas atrapan en sus telas mosquitos y otros voladores.

Ninguna casa, por mucho que se limpie, está libre de bichos, según el informe. En las viviendas más antiguas se han encontrado más cucarachas; en las modernas, por estar rodeadas de jardines, hay mas moscas y hormigas.

El estudio deparó también algunos misterios con solución. En, una de las viviendas se produjo un incremento espectacular de ácaros y los científicos no se explicaban el motivo. Tras algunas semanas, los científicos dieron con la ibérica causa: un jamón infestado de bichitos que la familia había comprado recientemente. En otro piso se produjo una repentina plaga de moscas a partir de un determinado día del mes de mayo. La explicación llegó a toque de clarín: la casa estaba situada en las proximidades de la plaza de toros de Las Ventas y las moscas acudían prestas al despiece de los toros lidiados en la pasada Feria de San Isidro.