Los personajes mas populares de Antonio Berni se exponen en Madrid

La primera exposición en España del pintor argentino Antonio Berni (1905-1981) se inauguró ayer en la Fundación Arte y Tecnología, de Telefónica, en Madrid (Gran Vía, 28), con pinturas y grabados sobre sus personajes más populares: Juanito Laguna. y Ramona Montiel. Al acto asistió el escritor y amigo del artista Ernesto Sábato, para quien Berni se distingue por "esa vasta y profunda visión de la existencia que sentimos detrás de ella y a través de ella; la visión de un poeta que, como todo poeta, está en el bando de los demonios". La muestra estará abierta hasta el 23 de julio.

"Berni es el primer surrealista de Latinoamérica y su obra es un gran friso social, en el sentido de condición humana", declaró la comisaria de la exposición, Laura Buccellato, quien ha realizado una amplia cronología y bibliografía del artista que aparece en el catálogo, junto a textos de Ernesto Sábato, Ernesto Schóó y del propio artista. Para su conocimiento en España -sólo algunos cuadros de Berni se mostraron en una colectiva de la Expo 92 de Sevilla, aunque llegó a exponer en Madrid en 1928- la comisaria ha elegido las series dedicadas a los personajes de Juanito Laguna y Ramona Montiel, que han pasado al cancionero popular.En dos espacios se han situado los collages y los grabados gofré que identifican la práctica artística de Antonio Berni con la utilización en los cuadros de gran formato de objetos de desecho y cotidianos sobre madera. En estas obras aparecen a partir de 1960 Juanito Laguna, un niño de los suburbios, y Ramona Montiel, una costurera y prostituta.

"Los cuadros sobre estos personajes son como una novela literaria o mejor como un culebrón, ya que es como la realidad de la vida a través de un elemento paródico", dice Laura Buccellato. "Berni, de la generación de Arlt, Borges y Marechal, es profundamente humanista, con una gran preocupación por la condición humana y la justicia social. Tiene una gran vinculación al surrealismo, desde que conoció a Marinetti en Madrid en 1927 y su posterior amistad con Artaud; a la metafisica, deslumbrado por Giorgio de Chirico, y al nuevo realismo. Sus personajes tienen algo de friso histórico, desde que descubrió los murales y el renacimiento".