El director del Cesid niega que el 'informe Crillon' se pagase con fondos de los servicios secretos

El teniente general Emilio Alonso Manglano, director del Centro de Estudios de Investigación de la Defensa (Cesid), principal servicio español de inteligencia y contraespionaje, negó tajantemente ayer que el denominado informe Crillón se pagase con cargo al capítulo de fondos reservados de su departamento, en contra de lo denunciado por el ex director general de la Guardia Civil Luis Roldán. El teniente general Alonso Manglano descartó que no se hubiese enterado de que los fondos salieron de su departamento dado que "todos los fondos reservados del Cesid" dijo, "pasan por mi mano".

El general se mostró "convincente y seguro" en su declaración pero "tajante en las negativas", según las fuentes consultadas por este diario. Manglano compareció rodeado de un espectacular despliegue de geos en unas dependencias del Tribunal Supremo. llenas de andamios y escombros. La cita fue a las cuatro de la tarde, hora buscada a propósito para hacer posible su traslado por dependencias interiores con la mayor discreción, sin dar más cuartel a los informadores que hacer unas cuantas fotos cuando se dirigía a la sala de interrogatorios, donde le esperaba el magistrado instructor del Supremo Eduardo Moner. Las vallas de contención utilizadas en este tipo, de comparecencias se situaron ayer a una distancia casi desmesurada.El general fue interrogado por el fiscal del Tribunal Supremo y negó que de su departamento saliesen los fondos reservados con los que, según Roldán, se atendió el pago del informe Crillon sobre las actividades del entonces presidente de Banesto, Mario Conde.

Según la denuncia de Roldán, por el informe Crillon se pagaron un total de 67 millones, que se fueron pagando de forma escalonada: unos siete millones mensuales. Los pagos, según Roldán, los habría hecho en alguna ocasión el propio vicepresidente Narcís Serra, pero principalmente y por su orden, José Enrique Serrano, secretario de Vicepresidencia. El origen de los fondos era del Cesid-Ministerio de Defensa, según Roldán, a quien se lo remitía, "previsiblemente procedente del Cesid", el ministro de Defensa, Julián García Vargas.

Manglano, que se revelé como una persona de carácter", según una fuente del Supremo, se mostró tajante en las negativas y dio por ello poco margen a las repreguntas. Aseguró que no sólo no había librado fondos para el pago del informe Crillon, sino que tampoco dio fondos al ministro de Defensa para su pago. En concreto, manifestó que no dio dinero de los fondos reservados asignados a su departamento "a ningún ministro ni a ningún cargo público".

A José Luis Rodríguez Porto, presente en la declaración como abogado y cuñado del capturado ex director de la Guardia Civil, se le notó enseguida que la declaración del teniente general Manglano no había discurrido de acuerdo con sus intereses. Primero intentó eludir a los medios informativos y después esgrimió como pretexto el secreto de las actuaciones. "Ya os podéis imaginar", se limitó a decir finalmente a los periodistas.

Por otro lado, el ministerio fiscal ha pedido al Tribunal Supremo que rechace la querella presentada el pasado abril por Luis Roldán contra el ministro de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, la secretaria de Estado de Interior, Margarita. Robles, y el director general de la Policía , Ángel Olivares, por las circunstancias que rodearon su detención y traslado a España.

El fiscal señala que de los papeles de Laos ya se ocupa el juzgado de instrucción número 11 de Madrid, al que remite a Roldán para que explique allí lo que le convenga, y propone el archivo de la querella al no haber indicios contra ninguna persona aforada.