El director Vicente Aranda decide mantener viva la memoria de la guerra civil española

Vicente Aranda está decidido a luchar contra el olvido de la guerra civil española. A sus años, el cineasta acometerá la narración épica de un grupo de mujeres anarquistas en el Frente de Aragón. Libertarias, que comenzará a rodarse en julio con presupuesto por encima de los 400 millones de pesetas, cuenta con un reparto de lujo. Ana Belén, Victoria Abril, Ariadna Gil y Loles León darán vida alas libertarias, mujeres que se negaron a quedarse en casa tricotando para los hombres del frente. Aranda no terminará con Libertarias: la defensa de Madrid será su siguiente aproximación a la guerra española.

Ya lo advirtió al finalizar el rodaje de su anterior filme, La pasión turca: "Esta será mi última incursión en el erotismo, a partir de ahora me dedicaré a la épica". Y la épica española para Vicente Aranda es la guerra civil. "Los españoles somos esclavos de un falso concepto sobre la guerra civil española: que todo está dicho y que estamos cansados de ese suceso histórico", señalaba ayer en su casa de Madrid el director. "Es falso", se contestaba a sí mismo, "y la prueba la tenemos ahora mismo en la expectación creada en torno al filme de Ken Loach Tierra y libertad". Convencido de que la situación democrática en España se ha logrado a través de un acuerdo aceptado por todos que implicaba el olvido de la guerra civil, el cineasta está dispuesto a contribuir a la ruptura de ese acuerdo. "La censura nunca es buena, aunque sea voluntaria", reconoce Aranda, para quien las únicas incursiones cinematográficas españolas sobre la guerra han sido "escasas y tontas". "La guerra española estuvo supeditada, sobre todo en Cataluña, al ensayo de una revolución utópica".La idea de Libertarias le viene a Aranda de hace 15 años, a lo largo de los cuales el puesto se lo iban arrebatando otros proyectos cinematográficos. Basado en anécdotas reales pero con algunas modificaciones, el filme, con guión del propio Aranda, José Luis Guarner (fallecido en noviembre de 1993) y Antonio Rabinad, narra la historia de seis mujeres que se incorporan al estado revolucionario en Cataluña implantado al día siguiente del levantamiento de Franco y van a luchar al Frente de Aragón.

El filme, producido por Iberoamericana y Sogetel, tiene una duración narrativacorta -concretamente, del 19 de julio de 1936 al otoño de ese mismo año, con Durruti todavía vivo- y en pantalla sobrepasará las dos horas. "La construcción de la historia fue muy laboriosa, basada en documentos y material de los que ya he olvidado casi su procedencia", recuerda el director, que tras él estreno de La pasión turca retomó el trabajo del guión. El rodaje durará 12 semanas y se realizará en Cataluña, Aragón y alrededores de Madrid.

Ha sido un británico -Ken Loach, con Tierra y libertad- el que se ha adelantado a Aranda en la narración épica de la guerra española. "Salí del cine francamente emocionado y agradecido", explica Aranda del filme de Loach. "Me han dicho que en muchas de las proyecciones la gente aplaude. Cuando yo la vi no sucedió eso, pero no me hubiera importado nada aplaudir. Estoy de acuerdo con Loach en que hay que contar la guerra civil con cierto espíritu crítico". Aranda es consciente de que tendrá que tener en cuenta Tierra y libertad -"más en la promoción que en la realización"-, y, aunque hay alguna coincidencia' de fondo con su Libertarias, el director barcelonés se centrará más en el tratamiento de los personajes que en el político.

Tenía ocho años cuando se inició la contienda -"trágico y triste para los adultos, pero divertido para los niños"- y está decidido a no olvidar. "Somos los hijos o los nietos de aquellos personajes que vivieron una situación excepcional que nunca se ha contado".