Aznar anuncia que si llega al Gobierno hará una a reforma laboral que provocará "incomprensiones"

José María Aznar no habló ayer de impuestos aunque si anunció una reforma laboral qur generará "incomprensiones". Frente a las críticas socialistas, remachó que no pienso contestar, dijo, a sus insultos y descalificaciones. Pero para contrarrestar las acusaciones de Alfonso Guerra, que el sábado le presentó como un antiguo falangista puso el énfasis desde Logroño, donde se inició en la política, en recordar su defensa de la Constitución. En el pabellón polideportivo de Las Gaunas, abarrotado por 3.000 personas, el presidente del PP evocó su primer acto público, como militante de la antigua Afianza Popular, para apoyar la Constitución de 1978. "Hoy, la Constitución sigue siendo la mejor garantía de convivencia" dijo.

El discurso de Aznar no es compaciente hacia los suyos. El público, que se enardeció el año pasado en la campaña de las europeas con los cañonazos dialéctos contra Roldán y Filesa, pace comprender ahora el campo de registro de su líder, que se presenta como contrafigura de los males derivados de la etapa socialista. "Vengo a pediros", subraya "vuestra ayuda. Vengo:pediros vuestro esfuerzo, sacrificio y trabajo. España necesita que digáis 'se acabó'. ¡Se acabó! "Se acabaron las bromas y vamos ponernos a trabajar".Ayer Aznar confirmó que su partido, si gana las elecciones generales, abordará una nueva reforma del mercado laboral impulido por la preocupación de que 40% de los contratos de trabajo vigentes sean temporales y por el -uniento, del paro juvenil. "Sé que sa reforma va a traer incompren-.' ¡ones", advirtió, "pero tenemos .ue afrontarla. Y el que quiera un ,ais cargado de impuestos, de corrupción y de paro, ya lo tiene, que nolo cambie".

Las incompresiones a las que aludió el presidente del PP no paece que vayan a ser obstáculo para que los populares apliquen su reforma caso de llegar al Gobierno. José María Aznar reiteró a los logroñeses que "es imprescindible" poner en marcha esta reforma "para que los jóvenes accedan a su primer empleo".

El aumento de agresividad de los socialistas en la campaña no parece alterar el pulso de su adversario, que salió de Madrid decidido a, no entrar en las refriegas y en el cruce de descalificaciones. 'Llevo a mis espaldas demasiadas descalificaciones y demasiados insultos, declaró ayer por la mañana ante sus seguidores. "Ellos se dedican a eso. Dejémosles" modernizar el PP.

Aznar recordó que su incorporación como militante a la política activa se produjo en Logroño, su primer acto público fue en defensa de la Constitución y su primer trabajo "contribuir a preparar el estatuto de autonomía de La Rioja". "Aprendí a empezar", dijo, "no desde lo alto, sino desde lo que estaba más alejado del poder. Desde entonces, algo he hecho por centrar, moderar y modernizar el PP hasta convertirlo en un gran partido de gobierno

Esta convicción es la clave de la campaña de los populares, cuyo líder asegura incluso que la renuncia del Ejecutivo a hacer frente a sus responsabilidades obliga a asurrúrlas al principal partido de la oposición. "Cada vez más gente me dice que no critico a mis adversarios. Es verdad. Para qué me voy a ocupar de los socialistas y de sus cosas, si quienes tienen que resolverlas son ellos". Aznar no necesita ser más explícito, porque el público que acude a escucharle sabe que en ese "sus cosas" está comprendido el catalogo completo, de Mariano Rubio a Luis Roldán y de Filesa a los GAL.

Lo que le interesa es aumentar la ventaja que le otorgan los sondeos y conseguir una mayoría "amplia, clara", como repite todos los días, para "abrir las puertas al cambio". "Necesitamos los alcaldes y presidentes autonómicos de la renovación y la regeneración", proclamó ayer, "que van a ser los cimientos del cambio"."Hay que llegar a los ayuntamientos y comunidades autónomas para cambiar, para innovar", agregó. "No hay que llegar para quedarse quietos ni para sustituir al que está ni para sustituir a los amigos de los que están con nuestros amigos, Eso, de ninguna manera. Eso no es el cambio". Por la tarde, Aznar participó en otro mitin en Pamplona.