Solbes anuncia una reducción de 90.000 millones en el déficit público de abril

El Estado consiguió un superávit de 90.000 millones en el mes de abril, lo que permitió reducir el déficit público acumulado este año a 680.000 millones, anunció ayer en Oviedo el ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes. El ministro se mostró convencido de que el producto interior bruto (PIB) crecerá este año por encima del 2,8% previsto por el Gobierno e insistió en que se deben seguir controlando el déficit y la inflación. El informe trimestral de Economía, hecho público ayer, advertía precisamente de que las tensiones inflacionistas pueden frenar la inversión.

El ministro de Economía dio a conocer el superávit presupuestario de abril antes de pronunciar una conferencia ante la Cámara de Comercio de Oviedo. Solbes aseguró que la reducción de un poco más de 90.000 millones" en el déficit responde al buen comportamiento de los ingresos, "de acuerdo con las previsiones", dijo. El 95% de estos ingresos corresponde a impuestos puesto que no hubo "privatizaciones ni ingresos patrimoniales y las transferencias jugaron un papel mucho más reducido".Según Solbes, el excedente de abril servirá para reducir el déficit acumulado desde principios de año a 680.000 millones. Esta cifra es, con todo, algo superior a la del mismo mes del año pasado, pero ello se debe a que hasta abril de 1994 hubo fuertes ingresos patrimoniales por los beneficios del banco de España. Por este concepto se ingresaron 525.000 millones frente a los 175.000 de este año. El ministro añadió que para el mes de mayo, la mejora será aun más notable puesto que entonces se percibirán los ingresos por la privatización de Repsol.El titular de Economía dijo que el crecimiento del PIB previsto por el Gobierno para este año, del 2,8%, no se revisará, aunque, en su opinión, se va a superar. Para conseguir un cremiento sostenido, hay que seguir esforzándose, dijo, en reducir el déficit fiscal y contener a inflación. Aseguró que no cree en alternativas económicas, como la del PP, basada en reducción de impuestos. En cuanto a los presupuestos para 1996, cuya negociación debe empezar en breve, el ministro advirtió de que el pago de intereses por la deuda será peor que este año porque la deuda será algo mayor. Por su parte, el informe trimestral del Ministerio de Economía y Hacienda, hecho público ayer, señala que la economía española crece a un ritmo del 2,8% durante el primer trimestre y destaca que la inversión es, en la actualidad, el motor del crecimiento frente al consumo que está estancado.Economía advierte, sin embargo, "que existen algunos riesgos que podrían desincentivar y ralentizar la inversor, entre ellos, las tensiones inflacionistas y sus posibles repercusiones sobre los tipos de interés, así como por la ralentización de la demanda por el estancamiento del consumo privado".El informe apunta al tercer trimestre del año como fecha a partir de la cual puede registrarse una recuperación del consumo conforme la mejora en el empleo "vaya ganando intensidad".Economía señala, sin embargo, que el actual patrón del crecimiento -inversión fuerte y consumo débil- puede considerarse "óptimo" aunque poco usual en las etapas de expansión de la economía española. La principal beneficiaria de este cuadro sería la inflación, aunque las subidas de impuestos y la sequía han calentado los precios. Economía confía en que s e recupere la tendencia bajista, aunque da por perdido el objetivo oficial (3,5%) y fuentes de este ministerio apuntan un "en torno al 4,3%".