Detenido un cura por intento de estafa al Vaticano en relación con un secuestro

Antonio Intiso, de 58 años, sacerdote desde hace cinco lustros y presidente de la Cáritas de Foggia, localidad del sureste italiano, fue detenido ayer por presunta estafa al Estado de la Ciudad del Vaticano perpetrado en relación con el secuestro de la hija de un empleado de la Casa' Pontificia cuya liberación Don Tonino, como era conocido el sacerdote, pretendía estar negociando.La magistratura y la policía de Roma llegaron a la conclusión, tras interrogar a Intiso, de que tan sorprendente mediación, pues el secuestro fue realizado hace 12 años, no existía y de que lo que el sacerdote pretendía, con otro abogado meridional y un tercer detenido no identificado, era sacar algunos cientos de millones de pesetas al Vaticano. Un portavoz de la Santa Sede negó el martes que hubiera alguna negociación para lograr la liberación de Emanuela Orlandi.

El caso de esta joven, que desapareció el 22 de junio de 1983, cuando se dirigía a clase de flauta, había sido olvidado por los italianos. Pero un diario de Roma, Il Messaggero, informó en días pasados de las misteriosas negociaciones. Orlandi, si estuviera aún con vida, tendría 27 años, se encontraría en paradero desconocido y tendría un hijo de cinco años concebido en cautividad, según Il Messaggerol."Hija de cardenal"

Don Tonino no irrumpió hasta ayer en la actualidad con una inesperada entrevista publicada por el mismo periódico, en la que afirmaba cosas tan sorprendentes que en el Vaticano se dice que "la chica es, al parecer, hija de un cardenal". También precisaba que Emanuela se encuentra probablemente en manos de un grupo de la Camorra, la Mafia del área de Nápoles, el cual, a su vez, habría comprado la chica a otra organización de delincuentes. Y añadía que es posible que Emanuela colaborara con sus actuales captores por una venganza que no aclara.

El sacerdote desmintió por la tarde toda esta entrevista, después de que lo hiciera furibundo su superior, el arzobispo de Foggia, Giuseppe Canale. Éste consideró "paradójico" que su cura hubiera sido detenido como estafador, ya que, dijo, Don Tonino no había intervenido directamente en ninguna negociación, sino que se había limitado a intentar poner en contacto al Vaticano con terceros que decían tener secuestrada a Emanuela Orlandi. "Don Tonino puede ser acusado de imprudencia, de haber caído en una trampa, pero nada más", insistió Canale.

La fiscalía romana tiene otra visión de los hechos, sobre todo tras comprobar que, al cabo de muchas horas de interrogatorio, el sacerdote no lograba aportar ningún dato real que le hubiera inducido a creer en la posibilidad de estar tratando con los verdaderos secuestradores.

"Cada vez que oigo decir que está viva, me lo creo. Mi mujer y yo no hemos perdido la esperanza", declaró, Ercole Orlandi, el padre de Emanuela.