La crisis resquebraja el apoyo de los empresarios catalanes al PSOE

Lo que no han logrado ni las permanentes apelaciones de José María Aznar ni la superposición de escándalos políticos puede acabar lográndolo la peseta: las tormentas monetarias y, sobre todo, el pánico de que el hundimiento de la divisa española derive en una subida de los tipos de interés está poniendo en cuestión el apoyo del empresariado catalán a Jordi Pujol y su política de sostén del Gobierno del PSOE.Las voces de inquietud de la clase empresarial catalana están traspasando el umbral del comentario a media voz para empezar a salir a plena luz. Así lo admitió ayer Antonio Algueró, presidente de la patronal catalana Fomento del Trabajo Nacional. Algueró, presidente de Fomento desde hace unas pocas semanas, ha defendido sin ambages la continuidad del Gobierno al menos hasta que se consolidara la recuperación. Una posición que chocó frontalmente con las posiciones de su antecesor, AIfredo Molinas, y sobre todo con las de su colega de la CEOE, José María Cuevas.

Pero Algueró admitió ayer en declaraciones a Catalunya Ràdio que cada vez son más los empresarios que ponen en cuestión este apoyo. Según el presidente de Fomento, el empresario catalán se divide ahora entre quienes siguen defendiendo la necesidad de agotar la legislatura, quienes prefieren elecciones anticipadas y quienes se inclinan porque él PSOE y el Partido Popular pacten un calendario electoral.

El principal interrogante que inquieta a estos empresarios es la posibilidad de que la depreciación de la divisa española acabe traduciéndose en nueva subida de tipos de interés. Los empresarios catalanes creen que la inestabilidad política actual no es en sí misma razón suficiente para adelantar las elecciones. Pero si la recuperación se trunca por las tensiones monetarias, entonces se acabaría el compromiso empresarial con el PSOE y con Convergència i Unió.