González y Alvarez Cascos se enzarzan en una refriega dialéctica por los GAL

El presidente del Gobierno, Felipe González, vaticinó ayer que el PP mantendrá una línea de acoso en torno a los GAL tras su fracaso en el debate sobre el estado de la nación. "Cuando no les va bien un debate como el de hace dos semanas no tienen más remedio que descubrirse", afirmó, Francisco Álvarez Cascos, secretario general de los populares, acusó a González de haberse convertido en "una pesadilla" y el que "desestabiliza a este país". Todo esto ocurrió ayer en el pleno del Congreso de los Diputados en el trámite de control al Gobierno y en la refriega dialéctica por una pregunta de Álvarez Cascos al presidente del Gobierno en torno a sus posiciones sobre la justicia y los GAL.La pregunta era si podía considerarse "como demostración de la voluntad de colaboración del Gobierno con la justicia la contestación. que el presidente dio en la escuela Jaime Vera, el pasado 19 de enero, a la pregunta formulada por un periodista extranjero sobre el caso GAL". El periodista le preguntó: "¿Cómo es posible que diez años después se haga estallar este asunto [los GAL] cuando incluso ya ha desaparecido". González le contestó: "Tengo respuesta pero no quiero darla para que nadie- interprete que quiero interferir en el funcionamiento de la justicia".

A este complejo entramado de preguntas sobre otras anteriores respondió González ayer: "Tal y como está formulada la pregunta, no en. los términos sesgados en que le he oído, en una emisora, sí". A partir de ahí, y como es habitual en el turno de preguntas al presidente, la réplica se aleja casi por completo de la contestación anterior y supone la ocasión para lanzar una diatriba política ante el jefe del Gobierno.

Álvarez Cascos, apoyándose en el guión de un folio que exhibía en la mano, espetó a González que el origen de sus afirmaciones era el mismo que los intentos de atribuir a UCI) la creación de los GAL, algo que calificó como "insinuaciones y calumnias" porque, dijo, "la trama de los GAL no la reabre nadie porque nunca se cerró". Para Álvarez Cascos, los GAL se convierten en un escándalo porque "estalló el escándalo Roldán, que es el escándalo de la corrupción en el uso de los fondos reservados". Para el secretario general de los populares, el caso Roldán cambió la conciencia nacional" que ya "no acepta gobernantes sin escrúpulos que se enriquecen o que consienten el enriquecimiento".

En la réplica, González dijo que veía clara la intención de la pregunta, que no era otra, en su opinión, sino hacer "un discurso demagógico y torticero" [injusto o que no sé arregla a las leyes o a la razón] que de mostraba "poco respeto por el Estado de derecho y por la presunción de inocencia".

González aprovechó una pregunta del Grupo Socialista para asegurar que la bondad de los datos económicos de 1995 superará la prevista por el propio Ejecutivo. "Aunque ya ven que desde la oposición se dice que no se lo creen".