Se pone en marcha la polémica central hidroeléctrica de Picos de Europa

La central hidroeléctrica de Cordiñanes, en el turístico río Cares, situada en el futuro parque nacional de Picos de Europa, ha iniciado el periodo de pruebas técnicas. Se trata de la última central hidroeléctrica que se construye en lo que será un parque nacional.Con una potencia instalada de 9.800 kilovatios, esta central, de la empresa Navarro, SA, sólo cuenta con un salto de los tres solicitados (dos han sido denegados) y el Parlamento Europeo tramita en estos momentos una queja de los grupos ecologistas de Castilla y León, Cantabria y Asturias. La empresa eléctrica ha tenido un sobrecoste de 600 millones de pesetas en un proyecto de alrededor de 1.500 millones, por las exigencias de las administraciones públicas, vecinos y ecologistas, en especial, de minimizar el impacto sobre el medio ambiente, señala José María, Marquiegui, directivo de Navarro.

El tendido eléctrico de la central del Cares, de 23 kilómetros, se conectará temporalmente al de Iberduero, al ser imposible finalizar el proceso de expropiaciones de los terrenos.

La puesta en marcha de la central, con un embalse de 60.000 metros cúbicos, que no cuenta con depuración de aguas, ha reavivado la oposición de vecinos y ecologistas. Benito Díaz, jefe del Servicio de Calidad de Aguas de Castilla y León, ha manifestado que el Gobierno autónomo pretende instalar en los próximos cinco años estaciones depuradoras en zonas protegidas como Picos de Europa, Gredos, Urbión (Soria) y río Lobos.

Los colectivos ecologistas advierten que existen otros dos proyectos hidráulicos importantes, uno en el río Igüello, en Oseja de Sajambre, y otro en Llánaves de la Reina, ambos en la zona leonesa de Picos de Europa. Para evitar el primero, los ecologistas han interpuesto un recurso contencioso-administrativo, ya que cuenta con el visto bueno de la Confederación Hidrográfica del Norte. El segundo proyecto se encuentra en la actualidad en sus inicios.