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DEBATE SOBRE EL ESTADO DE LA NACIÓN

Aznar propone un pacto para celebrar en mayo las elecciones legislativas, autonómicas y municipales

Javier Casqueiro

José María Aznar no aprovechó ayer las bazas que se presumían a su alcance para contrarrestar los momentos políticos más bajos que se le recuerdan a Felipe González tras casi 13 años de gobierno, como éste reconoció. El líder del PP tampoco usó en su discurso inicial un tono especialmente duro en sus acusaciones ni recurrió a la coletilla del año pasado cuando le reclamó a González que se marchase. Sólo sé permitió proponer seis compromisos para salir de la crisis que se resumen en uno: adelantar las elecciones generales y agruparlas con las municipales, y autonómicas del 28 de mayo.

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Los otros cinco acuerdos básicos, según Aznar, para encauzar la actual inestabilidad política se consideran el aderezo de la auténtica propuesta básica del PP para precipitar las elecciones generales. Aznar prometió en este sentido que pactaría el orden del día de las cámaras hasta su fecha de disolución, el cuarto domingo de marzo, con prioridad a los proyectos de ley que el Gobierno determine y subordinando hasta entonces su función de control al programa legislativo.También aseguró que acordaría las medidas económicas y presupuestarias de ajuste que el Gobierno considerase urgentes e imprescindibles para la recuperación económica, así como la preparación y el éxito de la presidencia española de la Unión Europea.

El líder popular precisó que en esos meses se debería asegurar un respeto escrupuloso a los procedimientos judiciales en curso y garantías suficientes de imparcialidad de la radio y televisión pública. González deslegitimó cualquier posibilidad de respaldar esas iniciativas al catalogarlas como una broma.

Aznar, que había iniciado su exposición con un agradecimiento a todos los partidos por su comportamiento tras el asesinato de Gregorio Ordóñez, intentó luego desmontar el contenido del discurso de González al poner en duda que sirviese para algo el reiterado argumento de que el Gobierno ejerce porque tiene apoyos parlamentarios. Para Aznar, ese hecho no prueba nada porque, según su opinión, la crisis no es parlamentaria, sino de Gobierno.

Porque Aznar rechaza que los problemas de los españoles se puedan solventar fortaleciendo la estabilidad del Gobierno. "Si así fuera, no dudaría en ofrecerle todo mi apoyo y de mi grupo, y no sería la primera vez que se lo ofrezco ni la primera que usted lo rechaza". Sonaron los primeros abucheos socialistas.

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"Enfermo de mayoría"

Aznar recordó que contar con mayoría parlamentaria no le había impedido al propio González disolver las Cortes en abril de 1993. En ese instante, el presidente del PP acuñó una frase que luego González calificó como histórica: "El suyo no es un problema de mayoría. Señor González, a este Gobierno le sobra mayoría parlamentaria. Está enfermo de mayoría parlamentaria".

En este aspecto, Aznar comentó, en alusión al pacto del PSOE con CiU, que González "ha reducido el arte de gobernar, a un mero ejercicio de supervivencia al amparo de un teléfono. Al precario amparo de un teléfono que, hoy suena, pero que no sabemos si mañana sonará".

Toda esta disertación le sirvió a Aznar para conducirse hacia el asunto más candente con el que lidia el Ejecutivo con una pregunta: "¿Pretendo con esto decir que el caso GAL sea el único responsable de la crisis? Ni mucho menos". Aznar y sus más cercanos colaboradores del PP mantienen que el caso GAL es uno más. "Estas cosas no ocurren de repente. La confianza no se pierde en un momento o por un solo asunto. El vaso de su descrédito estaba tan colmado que una sola gota bastaba para rebosarlo. El GAL ha sido la gota que desborda el vaso".

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Sobre la firma

Javier Casqueiro
Es corresponsal político de EL PAÍS, donde lleva más de 30 años especializado en este tipo de información con distintas responsabilidades. Fue corresponsal diplomático, vivió en Washington y Rabat, se encargó del área Nacional en Cuatro y CNN+. Y en la prehistoria trabajó seis años en La Voz de Galicia. Colabora en tertulias de radio y televisión.

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