Un fuerte despegue de temporada

Mano Negra continúa ofreciendo espectáculos callejeros de tinte reivindicativo, dando así rienda suelta a los anhelos de lucha de una buena parte del público juvenil, consumidor de rock. Tocados con portuarios gorros de lana, los incondicionales y el grupo se encuentran periódicamente, bajo el frío glacial y la mirada respetuosa de las fuerzas. del orden, encargadas de velar por la seguridad de estos saltos espontáneos de música y solidaridad.La última vez, fue en la madrileña Puerta del Sol y a favor de los zapatistas. Por cierto, y en justicia, el Ayuntamiento tal vez ha debido entender Sr. Matanzo, en lugar de Sr. Matanza, Si no, tal y como son, no se comprende tanta permisividad.

Deadeye Dick son un trío de Nueva Orleans, autores de la canción más radiada de principios del 95, Mary Moon. Su primer disco los ha traído hasta España en promoción; su directo es intenso y sencillo, desoyendo las teorías de ruido y tortura sonora que parecían ya las señas de identidad del último rock americano. Es decir, suenan tan pop que parecen ingleses. Su coincidencia de estilo con la última generación de bandas británicas parece confirmar una inversión de tendencias, a favor de las melodías y un sonido más fácil.

Sello catalán

Desde Barcelona, desembarca en la capital el sello Al.leluya con una buena representación de su extenso catálogo nacional -esto último de gran mérito, tal y como está el panorama-. Al Zimma trabajan un áspero sonido hardrockero y están algo verdes. No obstante, tienen el divertido atrevimiento de perpetrar el Born to be alive, de Patrick Hernández. Rey Nicotina son más veteranos y dominan sus herramientas, en la búsqueda de un rock potente y directo. Tal vez, les frene un poco, su disposición a perderse en un laberinto de estilos, sin que se sepa muy bien con cuál de ellos desean quedarse. Proscritos son ya históricos re presentantes de un rock en el que el corazón es básico. La puesta en escena de su último disco, Hablando otras lenguas, revela una opción honesta, que invita a poner a trabajar la cabeza. mientras se escucha rock'n'roll. Excelentes los temas propios y versiones, el espectáculo de Proscritos reside en dos guitarras de acero y la segura voz de José Lapuente, que se atreve hasta con Led Zeppelin. Un grupo de los que nunca falla. Para terminar, todo un descubrimiento: Buenas Noches Rose un fabuloso quinteto madrileño con una media de 18 años, cuya referencia obligada son los Black Crowes. No obstante, tocan bien, tienen magníficas canciones y gozan de un cantante que, si las discográficas espabilan, puede reconciliar el rock español con el fenómeno de los fans en masa. Pura dinamita, mezcla de chulería, desplante juvenil y carga sexual a partes iguales. Un fenómeno, especie de Iggy en sus comienzos, para redención del aburrido rock español.