Bodas, bautizos y desconchones

Un monumento histórico-artístico puede perder la fachada a pedazos. La iglesia de San Manuel y San Benito tiene esa categoría desde 1982. Este edificio neobizantino, con vistas al parque del Retiro, atrae a cientos de parejas de todo Madrid para celebrar allí su boda el cupo para este año está completo o bautizar a los recién nacidos. Los conciertos de órgano y trompeta del templo también son muy conocidos... Pero lo más famoso últimamente son el deterioro cada vez más peligroso de la blanca fachada y los apuros que el párroco, Rafael de la Torre, pasa para conseguir los millones que necesita para la reparación. Comunidad y Ayuntamiento insisten en la urgencia de las obras, pero no aportan ayudas económicas. Mientras, el sacerdote inaugura una colecta.San Manuel y San Benito pierden la cara. Los desprendimientos de las losetas de marmol que decoran la fachada de este templo, situado en la esquina en que hacen la calle de Lagasca y la calle de Alcalá, son moneda corriente desde hace ya cinco años. Hace escasas semanas, los bomberos tuvieron que intervenir para despegar un rosetón que estaba a punto de caer a la vía pública.

Peregrinación

El Ayuntamiento envió entonces un requerimiento para que se realizaran urgentemente las obras de rehabilitación. "No han dicho que somos los responsables de los posibles daños", comenta preocupado el sacerdote, que lleva destinado en la parroquia 11 años.

Don Rafael lo ha intentado todo a fin de paliar el deterioro. La Comunidad de Madrid elaboró hace seis años un proyecto para llevar a cabo la rehabilitación del edificio -al ser monumento artístico requiere un plan firmado por la autoridad competente-, que se volvió a revisar el año pasado para ponerlo al día. Supone un desembolso de 73 millones de pesetas. "La Comunidad no encontró la aportación económica suficiente y nos lo dio a nosostros para que hiciéramos lo que pudiéramos", explica.

A continuación, De la Torre siguió su peregrinación en el Ayuntamiento, donde presentó el estudio de la Comunidad. "Luis María Huete [primer teniente de alcalde] nos recibió muy cordialmente, 'se quedó con el proyecto, pero de entrada dijo que las ayudas económicas no eran posibles. No se dio por aludido", comenta el párroco. "Estamos siempre en un peloteo entre Ayuntamiento y Comunidad", lamenta.

Las obras que requiere la iglesia de San Manuel y San Benito, construida en 1911 por el arquitecto Fernando Arbós, se refieren todas al revestimiento exterior de la fachada, en la que, además, la piedra está muy deteriorada. Se trata de anclar las losetas de mármol, reponer las piezas que faltan, desmontar y montar la barandilla del campanario, de momento lo más urgente, y revisar la estructura metálica.

Ante la pasividad de las dos administraciones madrileñas, el párroco optó por enviar cartas a los 3.500 feligreses que corresponden a este templo. "Han respondido bastante bien, pero es una comunidad muy pequeña", cementa el párroco. También fueron destinatarios de estas súplicas las 2.000 personas con título de nobleza que el párroco localizó. "La respuesta entre la aristocracia ha sido muy escasa hasta ahora", señala. "Mucha gente se cree que San Benito y San Manuel es una parroquia rica por la gente que vive en este barrio [el de Salamanca). Pero lo cierto es que tiene una demarcación muy pequeña".

De momento, gracias a la generosidad navideña y a las actividades de la parroquia, los cinco sacerdotes que pertenecen a esta iglesia han conseguido 18 millones para iniciar la primera fase de las obras -que cuestan en total 25 millones- y que se destinarán a la repararación del campanario. Una comisión presidida por doña Margarita de Borbón, feligresa de San Manuel y San Benito, se ocupa de la recaudación de los fondos para. la rehabilitación,, que De la Torre está dispuesto a emprender este mes.

Según los cálculos del párroco, se consigue reunir algo menos de un millón de pesetas al mes. "Pero son unas obras que se prolongarán durante ocho meses. Y con ese dinero hay que hacer frente a la limpieza y mantenimiento de toda la iglesia", indica de la Torre.

San Francisco el Grande

Lo que no está dentro de sus planes es cobrar, a los novios que llegan desde otra parroquia a San Manuel y San Benito para casarse. "Es algo que hacen en muchas iglesias, pero no sé si eso entra dentro de la igualdad cristiana", dice.

Que no pase como otra gran iglesia madrileña, la (de San Francisco el Grande: ya nadie la recuerda sin andamios. Este templo lleva 20 años con andamios y existen aún grandes desperfectos que es necesario reparar. La comunidad franciscana que regenta la iglesia ha manifestado que desea eliminar cuanto antes los andamios para comenzar el culto en el altar mayor, informa Europa Press.