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Las nuevas técnicas marcarán el arte en el futuro

Nuevos centros revisiones y polémicas

Este lustro que se acaba ha sido parco en hechos emblemáticos. No hay demasiados fetiches y prácticamente ninguno de los profesionales consultados se atrevió a hablar de nombres concretos. Falta de perspectiva, dicen, o miedo a equivocarse en las apuestas, añaden. Pueden indicarse, eso sí, algunos acontecimientos o tendencias que marcan lo que ha sido este inicio de década.Centros de arte. El nacimiento de nuevos museos o centros de arte ha ido a más, desde orinales de los ochenta hasta ahora. Se destaca especialmente la labor del IVAM de Valencia, de la Fundación Tápies de Barcelona y la apertura del museo gallego. En la parte negativa se colocan la situación del Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona y, en menor medida la valoración general del trabajo que ha realizado a lo largo de este lustro es buena, la crisis del Reina Sofia.

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Polémicas. Algunas exposiciones han creado una amplia polémica que para unos se ha sobrevalorado excesivamente, algunos consideran que refleja un cambio en la apreciación del arte de vanguardia y para otros ha sido positiva como elemento de reflexión. Las más emblemáticas han sido las exposiciones de Antonio López y Josep Beuys, ambas en el Reina Sofia de Madrid.

Revisiones históricas. En toda Europa, y también en España, han proliferado exposiciones en las que se recopilaban periodos históricos o artistas de pasadas décadas. En las primeras, algunos han destacado las tres partes de Las edades del hombre, la muestra Orígenes, en Oviedo, y las revisiones de la obra de Bruce Nalaman y Beuys las dedicadas a Miró o Hausmarin.

Crisis del mercado. En esto tampoco hay dudas. La crisis del mercado del arte ha sido muy importante, y por el momento no se advierten, al menos en España, signos claros de recuperación.

Nueva legislación. La inclusión del arte contemporáneo en la Ley de Fundaciones y de Mecenazgo, una de las grandes aspiraciones de estos últimos años, se ha visto como un paso positivo. La ley no es perfecta, dicen, pero más vale algo que nada.

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