El veto de Rusia en las Naciones Unidas deja en entredicho la mediación internacional en Bosnia

La posibilidad de una mediación internacional para acabar con el conflicto de Bosnia quedó ayer, de nuevo, en entredicho después de que Rusia hiciera uso de su derecho al veto para impedir una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU contra los serbios. La decisión de Rusia que llega en el momento en que la comunidad internacional parece plegarse a las condiciones de los serbios, pone en evidencia las tensiones dentro del grupo de contacto, al que ese país pertenece junto con Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Alemania.

ANTONIO CAÑO Excepto Alemania, que no es miembro permanente del Consejo de Seguridad, los otros tres países aliados votaron en la madrugada de ayer a favor de una resolución que pretendía impedir el suministro de petróleo desde Serbia a los serbios de la región de la Krajina. Ese combustible es, utilizado en realidad, según la ONU, para alimentar al ejército que combate en Bosnia.Pero de forma completamente inusual en los últimos años, Rusia decidió vetar dicha resolución para dejar claro quiénes son sus aliados en este conflicto. Es la primera vez desde el final de la guerra fría que Rusia hace uso de su derecho al veto en un asunto de importancia. EE UU reaccionó con un breve comunicado de queja, y Francia y el Reino Unido guardaron silencio. Tuvo que ser el representante de una nación situada en las antípodas del conflicto, Nueva Zelanda, quien advirtiera que "nada bueno puede venir como consecuencia de esa actuación".

El veto de Rusia es un nueva victoria política de los Serbios en una semana en la que se han modificado significativamente los términos del conflicto. El fracaso del Consejo de Seguridad sigue a la decisión de la ONU y la OTAN de renunciar a los ataques aéreos inmediatos contra los serbios, e incluso a patrullar las zonas protegidas, y se produce después de que se haya comenzado a aceptar la idea de que los serbios de Bosnia pueden formar una confederación con Yugoslavia.

Estos cambios encontraron cierto reflejo en la declaración final de la reunión del viernes de los ministros de Asuntos' Exteriores del grupo de contacto, y pueden confirmarse en la cumbre de la Conferencia sobre Seguridad y Cooperación en Europa, que comienza mañana en Budapest.

El embajador ruso propugnó que lo que el Consejo de Seguridad de la ONU debería comenzar a plantearse es la suavización de las actuales sanciones contra los serbios. Rusia cree que esa es la mejor estrategia para animar a esa facción a aceptar el plan de paz propuesto por el grupo de contacto.

Mientras tanto, un convoy consiguió entrar ayer en el enclave de Bihac, sitiado por los serbobosnios, y llevar alimentos para siete días para los 1.200 cascos azules de Bangladesh allí desplegados. El Secretario general de la ONU, Butros Éutros-Gali, reiteró ayer en Ginebra que la colaboración con la OTAN es "perfecta" y con un rotundo si dejó claro quemo dudaría en solicitar su asistencia para ata ques -aéreos contra los serbo bosnios, informa Ana Fernández.

Butros-Gali precisé que el plan de acción para la retirada de los 24.000 cascos azules destacados en Bosnia, diseñado el pasado mes de junio con la cooperación de la OTAN, "está muy avanzado". Este plan responde a los deseos expresados por España, Francia, el Reino Unido, Rusia y Canadá de retirar a sus soldados en el caso de que la ONU se pronuncie por el levantamiento del embargo de armas a. la antigua república, yugoslava.