El Gobierno y el Grupo Socialista quieren llevar al Congreso la nueva ley del aborto en febrero
Gobierno pretende convencer al ministro de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, y a la inmensa mayoría de las mujeres del PSOE con cargos públicos de que esperen al año próximo para presentar en el Congreso la ampliación de los supuestos de despenalización del aborto. El objetivo es cerrar la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado con los socios nacionalistas catalanes para después lanzar otras iniciativas, entre las que se incluye la interrupción voluntaria del embarazo. En realidad se trata de que el proyecto empiece a tramitarse el próximo febrero.
ANABEL DÍEZ Desde el Ministerio de Justicia e Interior, no obstante, se toma como una cuestión de principio el compromiso del titular del departamento, Juan Alberto Belloch, de que el proyecto entre en la Cámara antes del 30 de diciembre.Si como el Gobierno asegura ahora el proyecto de ley en tra en el Congreso de los Diputados en febrero, y toda vez que el mes de enero resulta inhábil a efectos parlamentarios, el incumplimiento apenas sería tal. Las diputadas y mujeres con cargos públicos del PSOE se afanaban ayer en convencer a la dirección del grupo parla mentario para que se compro meta a cumplir el compromiso de Belloch no más tarde de febrero.
La razón principal para el retraso del proyecto de despenalización de un cuarto supuesto de aborto está en la oposición frontal que presenta CiU, y singularmente Unió Democràtica de Catalunya (UDC), partido de inspiración demócrata cristiana.
Dirigentes de Convergència Democrática de Catalunya, el socio de Unió en CiU, reconocen haber manifestado en las últimas semanas a responsables socialistas la inconveniencia de que se presentara este proyecto de ley antes del debate y aprobación definitiva de los Presupuestos Generales del Estado.
"Consecuencias"
El argumento del partido de Jordi Pujol no es sólo que la votación pudiera resultar "bastante deslucida" sino que, además, los demócrata cristianos advirtieron que podía tener "consecuencias", según relato de un dirigente del grupo parlamentario nacionalista catalán.
Precisamente del aborto se volvió a hablar en las filas nacionalistas esta misma semana, al hilo de la oposición de Unió Democrática de Catalunya a la proposición del PSOE para el reconocimiento de las parejas de hecho, aprobada el pasado martes.
En aquel caso, durante toda la tarde CiU intentó convencer al PSOE para que aceptara una enmienda del PP, en virtud de la cual las parejas homosexuales quedarían excluidas de la posibilidad de adoptar niños. Los socialistas se negaron a aceptar la enmienda y la consecuencia fue la abstención de CiU. En ese contexto, en el grupo nacionalista catalán se subrayó la conveniencia de no someter en este momento a debate el asunto del aborto.
El presidente del Gobierno, Felipe González, perfectamente consciente de esta situación, manifestó en reunión interna el pasado martes a sus parlamentarios la inconveniencia política de llevar la ampliación del aborto al Parlamento "en estos; momentos". A pesar de ello, invitó a los parlamentarios a expresar su opinión y aseguró que saldría adelante el criterio mayoritario. Nadie del grupo parlamentario tomó la palabra para reivindicar la urgencia del proyecto.
Las mujeres del PSOE reconocían ayer que, además de las dificultades que presenta CiU, en su propio grupo la mayoría de los hombres no ven la necesidad de sacar a la palestra un nuevo asunto conflictivo con. los problemas que ya tiene el partido.
Las mujeres insisten
Las mujeres socialistas, entre ellas la secretaria general adjunta del grupo, Arantxa Mendizábal insisten en que el proyecto para ampliar los supuestos de despenalización del aborto es querido por la mayoría de los electores socialistas y en que es voluntad de las mujeres del partido que esté en tramitación para las elecciones municipales y autonómicas del mes de mayo.
El asunto provocó ayer algunas situaciones de nerviosismo en el grupo socialista. La ex ministra de Asuntos Sociales Matilde Fernández fue abordada por algunos informadores para saber su opinión sobre el retraso. "Os creéis incluso más ombligo del mundo que los políticos", replicó. "Publicáis algo en los periódicos y a partir de ahí ya es una cosa que corre prisa".
La portavoz de Izquierda Unida- Iniciativa per Catalunya, Rosa Aguilar, anunció por su parte que al comienzo del nuevo periodo dé sesiones, es decir, en febrero, su grupo presentará una proposición de ley sobre el aborto idéntica a la anunciada por el Gobierno, para ver qué hace el grupo mayoritario.
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