Los Doce reactivan la vía diplomática en el conflicto de la antigua Yugoslavia

Los continuos ataques de las fuerzas serbias a la zona de seguridad de Bihac no sirvieron para que los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea (UE) tomaran ayer un decisión concreta para resolver o limitar el conflicto. Algunas fuentes diplomáticas, pidieron incluso, implícitamente, la presencia de soldados estadounidenses sobre el terreno para separar las partes enfrentadas. Ante la imposibilidad de parar la guerra -lo que necesitaría el envío de unos 500.000 soldados- los Doce optaron por reactivar la vía diplomática para garantizar la ayuda humanitaria, evitar que se extienda el conflicto y forzar una aceptación del plan de paz por todas las partes.La diplomacia comunitaria dispondrá en los próximos días de varias reuniones al más alto nivel -reunión el jueves de los responsables de Exteriores en la OTAN, encuentro del grupo de contacto el viernes por la. tarde, y cumbre de la CSCE la semana que viene- para intentar recomponer la postura de la Comunidad Internacional en torno al conflicto de Bosnia-Herzegovina.

El ministro español de Asuntos Exteriores, Javier Solana, confía en encontrar una fórmula para acabar con el sufrimiento de la población civil y mantener una posición común por parte de la comunidad internacional que sirva para presionar a las partes enfrentadas, fundamentalmente a los serbios de Bosnia para que acepten el plan de paz.

Los Doce tampoco tomaron ayer ninguna decisión sobre una eventual retirada de los: cascos azules, "técnicamente difícil y moralmente inaceptable", reconoció el ministro francés de Exteriores, Alain Juppé. Según Solana, para retirar las tropas de Unprofor, éstas deben encontrarse en una grave situación de peligro y sin poder proseguir su función humanitaria y de contención de la guerra.

Para la diplomacia comunitaria, la intensificación de las negociaciones, es la única medida viable. Los Estados miembros ya han desplegado sobre el terreno unos 35.000 hombres -una cifra insuficiente para separar a las partes- y las opiniones públicas de los respectivos países no aceptan el envío de más tropas, reconocieron fuentes diplomáticas. Juppé recordó que la reconquista de algunos territorios tras el levantamiento parcial del embargo a favor de una de las partes enfrentadas "sólo es una ilusión que nos conduce al desastre". "El levantamiento del embargo sobre las armas provocaría los mismos efectos o incluso peores consecuencias", añadió.Arafat y Siria

Por otro lado, el líder palestino Yasir Arafat se entrevistó ayer con la actual dirección comunitaria -Alemania, Grecia y Francia- para solicitar que acelere la entrega de la ayuda prometida. Arafat recordó que de los 700 millones de dólares previstos para este año, los palestinos sólo han recibido unos 60 millones, es decir, el 8% de la ayuda anunciada.

El ministro israelí de Exteriores, Simón Péres, confirmó ayer que las dos partes aceptaron potenciar la segunda vuelta de las negociaciones para celebrar elecciones en los territorios ocupados. Asimismo, los Doce decidieron levantar el embargo de armas a Siria. Péres replicó que sería "mejor levantar el embargo sobre las negociaciones más que sobre las armas".