Los técnicos municipales atisban ocho años de limpieza deficiente en 15 distritos periféricos

Las tres autoridades técnicas de la limpieza urbana que trabajan para el Ayuntamiento de Madrid redactaron el pasado 21 de noviembre un informe que vaticina el declive deeste servicio en la capital. ¿Motivo? La elección, contra su opinión técnica, de las ofertas más baratas presentadas al concurso para barrer las calles de 15 distritos y un barrio Argüelles). El PP aprobó la adjudicaciónpor un voto, pese a la ausencia intencionada de su edil Ángel Matanzo -"Cuando fui presidente de Centro quise despedir a Dragados por lo mal que limpiaban y ahora vuelven a contratarlos", explicó-.

El modelo ideal de los, técnicos costaba 2.200 millones de pesetas más de lo presupuestado por el equipo de José María Álvarez del Manzano.Juan Manuel Fontoira (ingeniero jefe de la sección de residuos sólidos), Abel Arias (jefe de la sección de limpiezas) y Gonzalo Martín Palomo (jefe del departamento de limpieza urbana) resumieron su juicio, en papel oficial, sobre la alternativa elegida para limpiar 15 distritos de la periferia: "La situación presupuestaria y la elección de las ofertas más baratas irá en detrimento de la calidad del servicio y, Por tanto, de la limpieza de Madrid".

Pero su jefa, Esperanza Aguirre, concejal de Medio Ambiente, piensa lo contrario: "Es el mejor plan de limpieza de los últimos 20 años". En la sesión plenaria que ayer adjudicó a tres empresas este servicio por 7.142 millones anuales, Aguirre interpretó el escrito de sus colaboradores: Los técnicos querían un Rolls-Royce de la limpieza y nos hemos conformado con un Mercedes que, sin duda, es mucho mejor que el coche que teníamos".

Las empresas que limpiarán 12,5 kilómetros cuadrados de calles de Madrid son tres: Urbaser, del grupo Dragados (que barrerá Latina, Carabanchel, Centro, Argüelles, Moratalaz y Vicálvaro), Alfonso Benítez, de Fomento de Construcciones y Contratas (Usera, Villaverde, Fuencarral, Tetuán, Hortaleza y Barajas) y Cespa (Chamartín, San Blas, Villa de Vallecas, Puente de Vallecas).

La oposición recordó insistentemente el informe de los técnicos y reclamó más dinero para barrer la ciudad. "Madrid está muy sucio y con esta adjudicación le esperan 10 años terribles. Hagamos una modificación presupuestaria para evitar la imagen fea y sucia de Madrid", reivindicó Ana Tutor (PSOE). José Luis Pestaña, de IU, consideró "absurda" la decisión de adjudicar el servicio a la oferta -se presentaron 798- más baratas. "Vamos a adjudicar la suciedad", resumió el edil.

Pero Aguirre se mantuvo firme: "Hemos elegido la mejor relación calidad-precio. En Arganzuela, con trabajadores municipales, el servicio nos cuesta 7.000 pesetas por persona, mientras que las contratas nos cobran 3.500 en otros distritos. Además, habrá un 40% más de máquinas, pasando de 162 a 234". "Y 500 empleados menos", replicó Tutor.

Pero la concejal de, Medio Ambiente anunció que las sopladoras de hojas y las baldeadoras con pértiga mejoraran notablemente la limpieza de la ciudad.

Además de aprobar, tras un intenso debate, la adjudicación (le la limpieza urbana por 57.136 millones y la recogida de basuras (a Fomento de Construcciones y Contratas) por 40.800 millones hasta el año 2002, el pleno ordinario de ayer discutió y resolvió otros asuntos importantes:

Cine Avenida. José Ignacio Echevarría, concejal de Urbanismo, se arrepintió a última hora y retiró del pleno el expediente que autorizaba un centro comercial de cinco plantas en el edificio del cine Avenida, en la Gran Vía. "No me lo he estudiado suficientemente", aseguró el edil. La oposición, IU y PSOE, estaba en contra del proyecto.

Plan 8.000. El grupo socialista intentó demostrar con un catálogo que Madrid tiene suelo vacío suficiente Para construir 21.096 viviendas. "Elijan lugares para 8.000 y convoquen un concurso de pisos baratos", rogó el edil José María de la Riva al equipo de gobierno. El titular de Urbanismo aceptó el encargo: "Lo estudiaremos y, si es viable, lo haremos. La vivienda es una de nuestras principales preocupaciones".

Mujer. Treinta asociaciones de mujeres exigieron ayer la dimisión de Esperanza Aguirre como presidenta del grupo de trabajo de la Mujer en el Ayuntamiento Porque durante su mandato, según denunciaron, no quiso dialogar ni aceptar ninguna de las propuestas. "Ha eliminado 647 becas de escuelas Infantiles, ha cerrado pisos para mujeres maltratadas, se ha negado a crear el Consejo de la Mujer", se quejaron.

Ordenanzas. El PP aprobó definitivamente los nuevos impuestos, tasas y precios públicos para 1995. El edil socialista Alfredo Tejero cuestionó la legalidad de la tasa por saneamiento: "Es superior al precio del servicio, y eso es ¡legal". Pero el concejal de Hacienda, Fernando López Amor, negó que la denuncia fuera cierta y su grupo votó a favor.