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Un viaje de ida y vuelta

Con el título Otros emigrantes. Pintura española del Museo Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires, la Caja de Madrid, en su sala de las Alhajas (plaza de San Martín, 1), presenta una selección de 63 cuadros de pintores españoles del siglo XIX y el primer tercio del XX, entre os que se encuentran figuras tan singulares como Vicente López, Federico de Madrazo, Esquiel, Pérez de Villaamil, Eugenio Lucas, Rosales, Fortuny, Haes, Martín Rico, Sorolla, Mir, Casas, Rusiñol, Zuloaga, Romero de Torres, Angla Camarasa, Iturrino, Solana y otros. Basta, desde luego, con la sucinta recopila ción de nombres, que acabo de hacer, para percatarse de la importancia de esta convocatoria, aún sin saber que el Museo Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires es, junto con el de La Habana, uno de los mejor dotados en arte español de toda América.

De hecho, en lo que se refiere al arte español del fin de siglo pasado puede competir, en calidad, con lo atesorado en las, mejores colecciones públicas de nuestro país, incluida la del propio Museo del Prado. En este sentido, aunque lo traído ahora a Madrid es lógicamente sólo una quinta parte de los fondos españoles del museo bonaerense, la calidad y la importancia de algunas piezas es deslumbrante, y además permiite un recorrido significativo por lo mejor de la historia de nuestro arte contemporáneo hasta el comienzo de las vanguardias del XX.

Planteada la visita según un orden cronológico, que arranca en la planta superior y concluye en la planta baja, nos encontramos, ya en la primera de las citadas, con el soberbio Desnudo femenino, de Rosales, que se acompaña bien con la Odalisca, de Fortuny, o la Salomé, de Masriera; o con el magnífico y extraño Ataque a un convoy carlista, de Villaamil. En la planta segunda, destacan los paisajes de Carlos Haes y Martín Rico, así como la realista escena costumbrista contemporánea de Antonio Fabrés, Vuelta de las carreras, o La pareja de ancianos, de Domingo Marqués, ambas con aires a lo Meissonier, por no hablar del retrato de Aline Masson, de Raimundo Madrazo.

En la tercera y última, la de la entrada, qué decir, con sus cuadros de Sorolla, Rusiñol, Casas, Anglada, Zuloaga, Vázquez Díaz, Romero de Torres, Iturrino, Solana..., casi todos con cuadros de mucha enjundia, pues sólo desean que el brillo de éstos no oscurezca el` bello paisaje de Mir, el retrato de Victoria Ocampo, de A. Miguel Nieto, y el curioso friso de caras de Viladrich.

Otros emigrantes.Sala de las Alhajas. Plaza de San Martín, 1. Madrid. Hasta el 22 de febrero de 1995. Horario: de martes a domingos, de 11.00 a 14.30, y de 17.00 a 20.00. Domingos tarde, cerrado.

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