Libertad para los cuatro detenidos de la agencia Brokerval

Al final de una intensiva tanda de declaraciones que concluyó cerca de las cuatro de la madrugada de ayer viernes, los cuatro directivos de la quebrada agencia de valores Brokerval de Palma detenidos por la policía el pasado martes, quedaron en libertad. Francisco Tous, consejero delegado, depositó 20 millones de fianza para eludir la prisión mientras que el presidente, Guillermo Coll, afrontó una fianza de cinco millones. Por su parte, el director de inversiones de la firma intermediaria, Fernando Mulet, y el jefe de contabilidad, Miguel Seguí, salieron del juzgado sin fianza. El consejero Francisco Berga, presunto cerebro de este caso -el mayor escándalo económico en Baleares que ha llegado a los juzgados-, se encuentra fugado.El juez del caso, Pedro Barceló, sostiene que existen presuntos delitos de estafa, apropiación indebida, falsedad documental y fraude a Hacienda. Barceló mantiene que el caso debe ser asumido por la Audiencia Nacional y considera correctas y ajustadas a derecho las detenciones que efectuó el grupo de delincuencia económica y financiera de la policía judicial de Palma. Los doce tomos de las diligencias están integrados por documentación elaborada por la policía y, en parte, por Hacienda. El juez reconoció que puede darse "alarma social" porque hay 120 perjudicados. El fiscal Juan Carrau solicitó al juez la prisión incondicional para Francisco Tous.

Hasta 16 abogados se personaron para participar en las declaraciones de los cuatro hombres vinculados a los negocios de Brokerval. Al menos dos de los letrados defensores expresaron durante la larga cita su preocupación por el previsible ingreso en prisión de sus patrocinados. Tal era la contundencia y magnitud del atestado policial que una letrada, en previsión, requirió el teléfono de la dirección de la cárcel de Palma. Uno de los detenidos tuvo una crisis nerviosa y rompió a llorar cara a la pared. Otro narró sus crisis psiquiátricas. El fiscal insistió en esclarecer el presunto delito fiscal de uno de los pelotazos inmobiliarios de Brokerval y el desvío de millones a proyectos fracasados.