Cumbre europea en Madrid sobre las 'autopistas de la información'
1.500 técnicos estudian cómo aplicar el Libro Blanco de Delors
Más de 1.500 expertos, entre los que se encuentran grandes, medianos y pequeños barones, dueños de las redes de comunicación, así como cerebros de las autopistas de la información de Europa, iniciaron ayer una reunión en Madrid respondiendo a una convocatoria hecha por la Dirección General de Telecomunicaciones de la Comisión Europea. Se trata de desarrollar el Libro Blanco de Jacques Delors sobre Crecimiento, competitividad y empleo: pistas y retos para entrar en el siglo XXI, y seguir las recomendaciones del grupo Bangemann sobre cómo construir la sociedad de la información global.
¿Está cada vez más cerca del ciudadano europeo el acceso a los nuevos servicios que prometen las autopistas de la comunicación? La respuesta que dan los considerados "cerebros" de la "era de la información", investigadores, directivos de los grandes operadores de telecomunicación, industriales y usuarios de servicios de tecnologías avanzadas es que sí. Algunos de estos servicios, como el vídeo a la carta, el correo electrónico y la videoconferencia están encontrando una gran aceptación. Otras aplicaciones multimedia se irán implantando progresivamente, según se ha señalado en esta reunión.Bajo la abstrusa denominación de Conferencia de Centros de Soporte I+D del programa ACTS (investigación sobre tecnologías y servicios avanzados en el sector de las telecomunicaciones) se esconde el proyecto más ambicioso con que Europa se propone hacer frente a la ofensiva lanzada en el campo del multimedia y de las autopistas de la información por Bill Clinton y Al Gore en Estados Unidos.
Con este nuevo programa, que ha sido dotado por la Comisión con 100.800 millones de pesetas para este próximo año, la Unión Europea y el sector privado se proponen acelerar la investigación y la aplicación en las telecomunicaciones avanzadas.
Que este sector está de moda no sólo entre los grandes industriales y financieros, sino también entre los profesionales, lo demuestra el hecho de que a las tres semanas de haberse publicado las bases del programa ACTS (que sigue la senda del anterior programa RACE sobre comunicaciones avanzadas) ya se han apuntado para desarrollarlo 4.200 investigadores y organizaciones de todo el espectro del sector de las telecomunicaciones.
Muchos de estos técnicos invadieron hasta reventar con su peculiar estilo de trabajo -puntualidad, seriedad, fe en la tecnología- los locales del hotel madrileño donde tenía lugar la cita. La organización de la UE había previsto la asistencia de unos 500 congresistas y acudieron más de 1.500.
Para demostrar que no operan sobre puras entelequias, los asistentes a esta conferencia, que bajo el paraguas organizativo de Telefónica se clausura hoy en Madrid, han podido asistir a demostraciones de: videoteléfono, transmisión de documentos y una amplia. gama de servicios multimedia.
Movilizar todos los recursos
"Ha llegado la hora de la movilización conjunta de todos los recursos europeos para avanzar en las autopistas de la información, entre otras razones para hacer frente al empuje de los norteamericanos y japoneses". Así se expresa Roland Hüber, responsable principal de la concentración de cerebros que comenzó ayer en Madrid.Al frente del programa de comunicaciones avanzadas de la dirección de telecomunicaciones de la Comisión Europea, Hüber asegura que "la base de todo es la tecnología, que ya está disponible; la implantación de los servicios vendrá después y se hará rápidamente".
Para este ejecutivo comunitario, Europa va "muy por delante" de Estados Unidos en el desarrollo de comunicaciones avanzadas. "Lo que sucede es que los americanos tienen una presión política muy fuerte para crear y promover los servicios. Los europeos partimos con la desventaja de que hay que conjugar distintos conceptos nacionales".
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