Un accidente con 50 heridos leves, retrasa el estreno de la gira de Pink Floyd

La gran fiesta terminó en desastre. El primer concierto de la gira mundial del mítico grupo de rock británico Pink Floyd tuvo que ser aplazado ayer en Londres cuando una de las tribunas traseras del pabellón de Earl's Court, donde iba a celebrarse, se vino abajo desde una altura de unos seis metros, hiriendo a 50 personas. El caos más absoluto presidió la escena al filo de las ocho de la noche, cuando más de 14.000 fans llenaban el auditorio. La mayor parte de los heridos, con pequeñas lesiones, fueron in gresados en los hospitales de Chelsea y Westminster, aunque sólo una joven, con una muñeca rota, requirió una atención médica más intensa.

Noel Jones, un especialista de ordenadores de 52 años y uno de los espectadores atrapados por, la caída de la tribuna, afirmó: "Las luces del escenario se habían encendido ya y todo estaba listo para el comienzo del concierto; de repente, todo se vino abajo" dijo. Jane Sen, portavoz del grupo, expresó la desolación de los tres integrantes de Pink Floyd. por lo ocurrido. A última hora de ayer, sin embargo, los organizadores de la gira mundial, que supone la vuelta del grupo a los escenarios tras siete años de ausencia, aseguraban que el concierto de hoy se celebraría con normalidad.