_
_
_
_
_
Reportaje:

La radio española cumple 70 años

Radio Barcelona, la emisora decana, convierte ahora en pública su valiosa fonoteca

"si no celebráramos nuestro aniversario, nadie festejaría el nacimiento de la radiodifusión en España", dijo el director de Radio Barcelona, Josep Maria Martí, para justificar el realce que la cadena SER va a dar al cumplimiento de los 70 años de vida de la emisora decana. Catorce lustros, justamente el próximo 14 de noviembre. Radio Barcelona, la Radio, va a recordarlos con una programación que trasciende el ámbito etéreo del dial y tomará cuerpo en la calle. Imbricarse en la vida ciudadana y convertirse en una institución ha sido un logro de esta emisora, aunque el mérito, cierto, es compartido: Barcelona y la radio se quieren con la fuerza de un primer amor.

Radio Barcelona ha empezado a celebrar su aniversario con la emisión diaria de una Crónica sentimental que Martí define como "la banda sonora de la vida de miles de barceloneses". Son 35 capítulos de 10 minutos que han tenido a su guionista, Joaquim Roglan, en cerrado durante meses entre cientos de miles de documentos sonoros. La emisión terminará precisamente el día 14, y con ella se editará un compacto, una buena idea por cuanto constituirá un documento sonoro de casi un siglo de historia privada barcelonesa, algo que se venía echando mucho de me nos en días tan propensos a la pérdida de la memoria.

Más información
Potentes bocinas Bell

Fonoteca pública

Esta iniciativa se completa con la cesión en depósito a la fonoteca de la Generalitat de los archivos de la emisora. Su enorme discoteca y los más de 250.000 documentos grabados pasarán a ser así de dominio público y serán sometidos a un proceso informático de clasificación que permitirá consultarlos con facilidad y sistema.También se publica un libro, en colaboración con el Colegio de Periodistas de Cataluña, sobre la historia de la emisora decana. Aunque parezca mentira, esta obra no existía. Setenta años han tenido que pasar para que la gente de la radio tomara conciencia de que no está en un medio efímero, sino sólidamente asentado en sus raíces.

Una exposición mostrará y permitirá escuchar el material cedido a la fonoteca pública y, en el acto de mayor proyección ciudadana, la calle de Caspe -"EAJ-1 Radio Barcelona, Caspe, 6", es un sonsonete que se ha oído millones de veces en estos 70 años- será convertida en la calle de la radio, una especie de Fleet street de las ondas o de Hollywood bulevard donde junto a cada árbol se instalarán, permanentemente, esculturas con los nombres de las estrellas de las ondas elegidas por votación popular. El Ayuntamiento avala esta iniciativa urbanística con la que la radio pasará a formar parte del paisaje físico de la ciudad.

Todos los nombres de la historia de la radio española, y no sólo los que han pasado por Radio Barcelona, optan a un lugar en ese panteón de la inmortalidad callejera. Aunque sería difícil encontrar alguno de los grandes que en algún momento de su carrera no se haya dejado oír por la decana, ya sea desde Barcelona o bien desde la cadena SER. Pionera en casi todo, Radio Barcelona es, en opinión de Iñaki Gabilondo, Ia madre de todo lo que ha ocurrido luego en la radio española". Gabilondo, que el miércoles dirigió su programa matinal desde la calle de Caspe, estuvo, de más joven, trabajando en Barcelona. Fue subdirector de la emisora ("el más efímero: estuve un mes", dijo) y dedicó a ella su tesis de periodismo.

Retransmisiones de conciertos o de deportes, concursos cara al público, audiciones musicales con orquesta propia, informativos, programas de beneficencia, radionovelas y montajes escénicos, cuna de la nova cançó, participación del oyente; en todo eso fue pionera la emisora. Hasta, si. se quiere, en reality shows: La familia Duran, una mezcla de ficción y realidad con el público debatiendo en directo los problemas familiares presentados en cada episodio se emitía. en los primeros cincuenta, con guiones de Carmen Vázquez Vega y locución de Enrique Casademont, el creador del popular personaje infantil Pau Pi. La memoria de Radio Barcelona es la de una casa en la que parecería que todo está inventado si no fuera porque cada día inventa 24 horas de radio.

En Radio Barcelona se realizan hoy un tercio de los programas de la SER para toda la cadena. No llegaron a tanto sus fundadores -el radio de acción inicial se limitaba a Cataluña, aunque a los pocos meses se integró en Unión Radio, precursora de la SER-, pero sí puede decirse que aspiraban a algo parecido o tal vez a más. Así lo recogía la publicación El Tiempo, editada con motivo de un aniversario de la emisora: "Hemos visto ya, en diversas barriadas, cómo los barceloneses instalan sus aparatos de galena para escuchar, con un poco de suerte, las campanas del reloj de la torre Eiffel. El alcance, la proyección y la amplitud de la radio es algo que queda fuera de la imaginación. La radio está más allá de la fantasía. Por encima de estos muchas veces ilógicos trazados que se llaman fronteras, la radio puede pasar con toda libertad. Quizá en un tiempo futuro podamos escuchar desde nuestros hogares la función del Liceo o las noticias de un partido de fútbol o los comentarios de los directivos de la Sociedad de Naciones reunidos en Ginebra. Con la radio, el mundo se hace más pequeño y más íntimo".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_