Hace 10 añoas que murió trágicamente Paquirri

Hace 10 años que murió Francisco Rivera Paquirri. Fue el 26 de septiembre de 1984, en Pozoblanco (Córdoba), donde el toro Avispado, cuarto de la tarde, de la ganadería de Sayalero y Bandrés, le cogió, al torear de capa infiriéndole una de las cornadas más terribles que recuerda la historia de la tauromaquia.La entereza del torero, ya en la enfermería, advirtiéndole al cirujano de las características de la herida -"Es una cornada fuerte..., tiene dos trayectorias..., usted haga lo que tenga que hacer, doctor..."-, impresionó a cuantos vieron aquellas sobrecogedoras imágenes captadas en un vídeo que transmitieron íntegro las televisiones.

Muchas veces a lo largo de esta década se ha repetido el vídeo, pues constituye el mejor y más impresionante testimonio del valor y la personalidad exclusiva de los toreros. Con especial intensidad en el caso de Paquirri, torero de vocación, recio y valiente, cuyo pundonor le hacía brillar en todos los tercios de la lidia. Y pronto fue, además, diestro de gran popularidad, que se acentuó cuando contrajo matrimonio con Isabel Pantoja.

Nacido el 23 de marzo de 1948 en Zahara de los Atunes (Cádiz), Paquirri sintió la vocación torera desde niño y vistió el primer traje de luces cuando tan sólo tenía 14 años de edad. Apenas cumplidos los 16 debutó con picadores y ya aquella temporada sufría su primera cornada, en un festejo que se celebró en la plaza de Zaragoza. Antonio Bienvenida le dio la alternativa en Barcelona pero otro percance le impidió matar el toro, y hubo de repetir la ceremonia poco después, con Paco Camino de padrino, quien asímismo le confirmó el doctorado -en Madrid, como es preceptivo- el 18 de mayo de 1967.

El hijo torero

Paquirri casó en primeras nupcias con Carmina Ordóñez, y tuvo un hijo, Francisco, que andando el tiempo abrazaría la misma profesión que su padre. El pasado domingo debutó en la plaza de Las Ventas, y repite hoy actuación en el festejo inaugural de la Feria de Otoño. Dieciocho años permaneció Paquirri como matador de toros, siempre ocupando los primeros puestos del escalafón, y era su propósito -truncado en Pozoblanco- retirarse cuando llevara 20, para dedicarse a su familia y disfrutar de un merecido descanso.El destino haría después una pirueta trágica: uno de sus compañeros de cartel aquel día fatídico, Yiyo, moriría también víctima de una cornada, en Colmenar Viejo.

Cinco diestros han fallecido durante el último medio siglo en España, como consecuencia de cornadas: además de Paquirri y Yiyo, Manolete, el 28 de agosto de 1947, en Linares; José Mata, el 25 de julio de 1971 en Villanueva de los Infantes, y José Falcón, en Barcelona, el 11 de agosto de 1974. Dos son, en definitiva, los luctuosos decenios que se cumplen este año: 10 años de la muerte de Paquirri, 20 de la muerte de Falcón.