Toros en puntas
Galache / Caballero, M. Sánchez, A. Sánchez.Cinco toros de Francisco Galache (uno devuelto por cojo), en puntas, bien presentados, de juego diverso. 6o sobrero de Soto de Luis, encastado. Manuel Caballero: estocada y rueda de peones (oreja); tres pinchazos -aviso-, media y dos descabellos (ovación y saludos). Manolo Sánchez: media, rueda de peones y dos descabellos (ovación y saludos); estocada aguantando, rueda de peones y dos descabellos (silencio). Andrés Sánchez: pinchazo, media, rueda de peones y tres descabellos (ovación y saludos); estocada corta a un tiempo, rueda de peones y descabello (oreja). Plaza de la Glorieta, 18 de septiembre. 8ª corrida de feria. Media entrada.
PERELÉTEGUI
Creo haber visto una corrida en puntas y no salgo de mi asombro. Creo haber visto una corrida de toros en la que hubo variedad de comportamiento, pero en la que el manso no se portó como un borrico, y me han dado escalofríos de gusto.
No pide tanto el aficionado. Sencillamente que los carteles se correspondan con la realidad. Ayer hubo esa correspondencia y a . pesar de la pesadez de la devolución del sexto, al que al fin hubo de apuntillar acercándolo a un burladero, la corrida ni se hizo pesada ni aburrida. Me parece que la razón es que en la plaza había toros. Bueno, toros y toreros porque ciertamente cada cual en su corte y en mayor o menor medida, los tres hicieron cuanto les fue posible por estar al menos con decoro.
Destacó el salmantino Andrés Sánchez, que entró en el cartel sustituyendo a Luguillano, enfermo con hepatitis. Andrés Sánchez estuvo hecho, un valiente, luciendo una serenidad pasmosa, tirando materialmente del tercero que tan pronto se venía como se quedaba parado como un mueble. Si ya el tercero le arrancó los machos de la pierna izquierda rebañándole la pantorrilla, los veletos pitones del último podían arrancarle la castañeta. Ni los atragantones le amilanaron, ni la repetición vigorosa del toro le aturdió. Andrés Sánchez estuvo hecho un jabato.
Andrés Caballero, toreó con aseo a su primero, un toro de alegre bravura y clara nobleza. Lo toreó bien, pulcramente y lo mató con decisión. En el cuarto, bravo y noble hasta decir basta, con una fijeza en la muleta admirable, pero absolutamente carente de fuerzas, estuvo lucido el torero, pero el toreo careció de emoción. Tuvo delante a un guirlache en silla de ruedas.
Manolo Sánchez puso empaque en algunos muletazos a su primero, un toro al que le costaba embestir y que le tiró un gañafón a la pechera mientras mugía, cosa que se pasó haciendo toda su lidia. En el quinto, que era incómodo, estuvo aseado y cuajó una buena tanda de derechazos.
Toros chicos en Sevilla
los chicos impresentables, inválidos y descastados se lidiaron ayer en Sevilla, con media entrada, informa Antonio Lorca.
Lo novilleros tuvieron este resultado: Adolfo de los Reyes, vuelta y ovación. El Cartujano, aviso y silencio; ovación. Gregorio Bravo, aviso y silencio; oreja.
Babelia
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