El memorándum del eterno agraviado

A Joaquín Leguina se le amontonan los agravios. El numero de conflictos y proyectos sin solucionar se mantienen candentes desde hace meses. Ayer formuló un repaso nada novedoso, pero muy ácido, a la ristra de polémicas engordadas por los políticos autonómicos y municipales. Además, detalló las reivindicaciones básicas que le recordará en breve, por escrito y en persona, a Felipe González.> Transferencias. Mañana, Leguina se entrevistará con el ministro de Administraciones Públicas, Jerónimo Saavedra. Madrid es una de las autonomías no históricas con menos competencias transferidas. El Gobierno regional quiere recibir ya la gestión de las universidades públicas -unos 80.000 millones- y tener así el nivel de competencias para acceder al control de todo el 15% del impuesto de la renta de las personas físicas (IRPF).

> Deuda sanitaria. Los hospitales dependientes de la Comunidad prestan servicios y camas a la estructura estatal del Insalud. Esto ha generado una deuda casi histórica que se eleva sobre los 30.000 millones y que Leguina entiende que está hundiendo su economía. Ha negociado su pago con varios ministros de Sanidad sin éxito.

> Financiación del transporte. El Ministerio de Hacienda quiere controlar más las subvenciones que hasta ahora concedía a fondo perdido por cada viaje que se producía en los transportes públicos de Madrid (veáse EL País Madrid de ayer). Esta negociación se cerrará este mes y condiciona los presupuestos regionales.

> Línea 10 de Metro. "Este tema reconozco que es susceptible de ponerme de mal humor", admitió Leguina. "Si el objetivo del Ayuntamiento era que no se inaugurase antes de las elecciones ya lo consiguieron hace tiempo, que no se preocupe Esperanza Aguirre [concejal de Medio Ambiente], porque ya la han retraso un año. El asunto tiene bemoles, porque es una infraestructura imprescindible que hacemos nosotros, pero que será propiedad del Ayuntamiento de Madrid, a la que le hemos cambiado la traza varias veces, y donde la ridiculez llega a tal punto que quieren proteger un jardín de Felipe II que ya no existía cuando él murió. Si yo no fuera presidente de la Comunidad y viviera en Aluche, como viví varios años, esta señora [Esperanza Aguirre] se iba a enterar".

Si el Ayuntamiento no cede en sus pretensiones de que la línea 10 no toque la Casa de Campo -"propiedad de los madrileños gracias a la República"- la Comunidad se autoconcederá la licencia, empezará las obras y a partir de ahí... la justicia proveerá. De la propuesta del PP de la Asamblea para construir un pasillo rodante de 300 metros que una Príncipe Pío con la futura línea 6, Leguina añadió: "Nadie en el mundo mundial se mete en un pasillo subterráneo de 300 metros, pero está claro, por la afición a los túneles de esta gente, que el próximo candidato del PP será un topo"

> Nuevos barrios. "No se quiere entrar en el debate de fondo de los PAUS. Ésto no se puede reducir a una batalla en la que el Ayuntamiento propone 72.000 casas y la Comunidad sólo quiere conceder 35.000. Lo que marca la diferencia es que ellos no ponían ni una sóla vivienda de protección oficial".

> Ciudad aeroportuaria. "Llevamos dos años y medio esperando a que el alcalde diga sí o no. Parece que ahora ya le ha dicho al ministro José Borrell que sí y nombraremos un gerente que desarrolle el crecimiento de los alrededores del aeropuerto".

> Plaza de Oriente. "Independientemente de la estética o de que nos guste o no, el Ayuntamiento tiene que saber que no vamos a poner inconvenientes de ningún tipo ni a incordiar, como nos hacen a nosotros, mientras cumplan con la ley".

> Asamblea. Los puyazos, en este caso, se dirigieron hacia la presidencia de la Asamblea de Madrid. Para Leguina el Parlamento regional está burocratizado, no se atiene en la duración de sus sesiones a lo estipulado en sus estatutos y se evita modificar el reglamento actual, "con miles de comparecencias que pide cualquier diputado a cualquier día y hora, para no tocar el dinero que se llevan a casa los diputados". Sobre el edificio propuesto para la nueva sede en Vallecas -1.000 millones más caro que el previsto en O'Donnell-, considera que "debería de ser más austero", y culpa al PP de no querer ir a Vallecas, piensan que van a ganar y que estarán más cómodos en la Castellana".