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Tabloncito, ¿que estudiaré?

Cientos de alumnos debutan en la Universidad protestando por la carrera que se les ha asignado

Nada más abrir sus puertas, tras el paréntesis de verano, las cinco universidades madríleñas se han llenado de alumnos obligados a estudiar lo que no querían. Allá por julio tuvieron que escribir, por orden, sus preferencias. Se podían colocar hasta 50 carreras. El jueves se supieron los resultados, y alrededor de los tablones donde se reunieron los estudiantes comentaban el destino universitario de cada uno.Los había plenamente felices porque irán donde siempre han querido ir: "He sacado 7,96 de media y haré lo que puse en primer lugar: ingeniero superior aeronáutico, que tiene un 7,54 de nota", comentó el jueves José Enrique Gómez, de 18 años. También se encontraban los no descontentos del todo porque, a pesar de que no irán a la facultad preferida, han ido a parar a una cartera que les gusta:- "Había pedido Navales (se necesita, un 6,5), pero he sacado un 6,43; me han mandado a Agrónomos; a mí me da igual" comentó José Luis Burgos.

En el otro lado estaban los condenados a estudiar las carreras que inscribieron en el decimocuarto, vigesimoprimero o cuadragesimoquinto lugar de la lista de preferencia, Éstos se encontraban el pasado jueves desmoralizados: "Saqué un 5,7 y no he entrado en nada; he pedido 45 carreras, pasando por Derecho y Ciencias de la Información, para quedarme en alguna parte, y nada; no sé si es que habrá algún fallo, porque ni siquiera me acuerdo de todas las que pedí, y a lo mejor alguna de las apuntadas necesitan menos nota de la que tengo; en fin, que estudiaré Químicas en una privada", decía Víctor Fernández-, de 18 años.

"Hay alumnos que tienen muy claro lo que quieren, pero hay otros muchos que eligen las opciones muy alegremente, sin información", comenta el vicerrector de estudiantes de la Universidad Politécnica, Nicolás Serrano.

Los servicios de atención al estudiante de las universidades Complutense, Autónoma, Alcalá de Henares, Politécnica y Carlos III atenderán hasta el 15 de septiembre todas las quejas que presenten los alumnos.

Y los alumnos están aprovechando esta oportunidad: al menos 950 reclamaciones se han cursado ya en las universidades madrileñas entre el jueves y el viernes. Aunque sin mucha esperanza: "A no ser que la gente que reclame sea de la que se le subió la nota cuando protestó en la selectividad, no hay muchas oportunidades; las plazas ya están dadas", comenta Serrano. En concreto, en la Universidad Autónoma, 70 alumnos presentaron su reclamación el pasado jueves.

En el registro de estudiantes de la Universidad de Alcalá de Henares se repartieron ayer y anteayer 250 impresos de protesta, informa Arantxa García de Sola.

En la Complutense, la cifra llega a 500, y en la Politécnica, el vicerrector de alumnos ha recibido ya más de 20 reclamaciones y espera bastantes más. Las universidades intentarán dar una respuesta rápida a las peticiones de los alumnos para que puedan matricularse dentro de los plazos permitidos. El vicerrector de estudiantes de la Autónoma, Ángel Gil, explica: "Tenemos que ir contestando día a día las solicitudes de los estudiantes para que no haya ningún tipo de atasco al final".

Los alumnos confor mes de la Complutense y la Politécnica ya comienzan a formalizar sus primeras matrículas universitarias. En estas universidades el plazo termina el día 15.

En la Autónoma, los estudiantes tendrán que esperar al día 13 para comenzar con el papeleo, y dispondrán de siete días para terminarlo. En la Carlos III, el plazo empieza el próximo día 12 y termina el 26. En la de Alcalá. se puede recoger su sobre de matrícula en cada facultad a partir del 5 de septiembre, y formalizarla del 15 al 20.

Los nuevos alumnos arrinconan a Mario Conde

Los gustos de los alumnos han cambiado. Este año están de moda las carreras sanitarias y decae la demanda para Economía, Derecho o Empresariales.Los estudiantes se alejan de las encuestas de finales de los ochenta y ya no quieren imitar a Mario Conde ni suenan con montar grandes imperios económicos. "Todo esto ya está de capa caída. Mario Conde ya está acabado, y, además, con la crisis que hay, quién se atreve a estudiar una carrera empresarial. Es más útil estudiar algo que tenga más salidas, y con todo lo que ocurre en el mundo siempre te puedes ir a ayudar como voluntario a los que más lo necesitan", argumenta Francisco Burgos, un alumno que espera cursar Medicina, si le admiten la reclamación. De momento, por una décima, no podrá ir en su día a cumplir misiones humanitarias.

La última hornada de universitarios prefiere las carreras biosanitarias. Esto se debe, según cuenta el vicerrector de estudiantes de la Universidad' Autónoma, Ángel Gil, a la concienciación y a la solidaridad de los estudiantes ante los problemas que afectan al Tercer Mundo.

El aumento de la demanda de dichos estudios ha disparado la nota de acceso en estas facultades. Así, por ejemplo, el listón para entrar en la Facultad de Medicina de la Autónoma ha aumentado 2,9 décimas. De un 7,50 se ha pasado a un 7,79. Otro tanto ocurre en la Complutense y en Alcalá de Henares.

En cambio, las notas de acceso de las carreras de letras han descendido. Una de las causas de esta caída se debe también al descenso de la nota de selectividad de este año.

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