Fidel Castro califica de desastre el nuevo fracaso de la zafra azucarera
El presidente cubano, Fidel Castro, reconoció el miércoles ante el Parlamento que la producción de azúcar este año sólo alcanzará los cuatro millones de toneladas, una de las zafras más bajas de los últimos 35 años, razón por la que el país perderá en 1994 casi 500 millones de dólares. Castro calificó el fracaso de la zafra como una catástrofe y afirmó que aumentar en breve la producción de azúcar, que sigue aportando casi las dos terceras partes de los ingresos de la isla, y de alimentos es ahora la máxima prioridad, pues de ello depende el futuro de la revolución.
Castro reconoció la gravedad de la situación y el fracaso de los planes agrícolas puestos en práctica hasta ahora, por lo que se mostró favorable a introducir nuevas formas de producción y estímulos al trabajo, como, quizás, dejar a los campesinos y cooperativas que comercialicen sus productos una vez que hayan cumplido con las entregas al Estado. "Los recursos no nos alcanzan. Por mucho que crezca el turismo, que crezcan otras cosas, no compensa", dijo, asegurando que la zafra en 1992 fue de siete millones de toneladas, el año pasado de 4,2 y este año de sólo cuatro, lo que ha supuesto pérdidas por valor de 1.000 millones de, dólares.El Parlamento cubano se reunió por segunda vez este año y, por primera vez en mucho tiempo, contó con la participación del ministro de las Fuerzas Armadas, Raul Castro, quien, tras escuchar las intervenciones de algunos diputados, dijo que le dolía ver la falta de crítica y la autocomplacencia de muchos y llamó a ser realistas y a "desterrar la inercia y la dejadez" de los que esperan un milagro. "Hoy valen más los fríjoles que los cañones", dijo Raúl Castro, añadiendo que "junto a la producción de azúcar, hoy la tarea principal es garantizar la comida". También los diputados cubanos discutieron ayer un proyecto de Ley Tributaria que su, pondrá la introducción de un sistema de impuestos en la isla tras 30 años de exenciones.
El proyecto prevé la creación de nuevos impuestos y la subida de tasas de otros ya existentes. Entre los nuevos está un impuesto sobre utilidades, que será aplicable a entidades económicas tanto estatales como privadas o mixtas, fijándose en principio una tasa del 35% sobre los beneficios.
Nuevos impuestos
Se incluye también un impuesto sobre los ingresos personales que, de momento, excluye los impuestos sobre ingresos obtenidos por concepto de sueldos, salarios y también por remesas familiares procedentes del extranjero, impuestos sobre las ventas, sobre los productos, sobre "la utilización de fuerza de trabajo". Para este último impuesto se incluyo una tasa del 25% sobre el salario, devengado.Los nuevos impuestos también abarcarán la utilización y explotación de los recursos naturales, tasas de peaje por utilización de carreteras y autopistas y por la realización de propaganda. Otros grupos de tasas ya existentes sobre los servicios públicos, sobre las transmisiones de bienes y herencias, sobre la propiedad, sobre los transportes terrestres, sobre documentos, contribuciones a la Seguridad Social y la tasa por servicio de uso del aeropuerto se incrementan entre un 2% y un 48%, según el tipo de servicio de que se trate.
La reunión del Parlamento cubano se produce cuando la isla atraviesa la peor crisis de su historia y los niveles de producción de hortalizas, leche, carne y huevos han decrecido de forma vertiginosa. Razón por la que el Parlamento estableció como prioridad la producción dé alimentos, considerando este asunto como un problema de seguridad nacional.
