Ruanda
Estos días el Primer Mundo asiste impasible, con las excepciones contadas de las organizaciones humanitarias de siempre, a la tragedia que está ocurriendo una vez más en el Tercer Mundo (quizá buena parte del continente africano podría situarse, dada la consideración que siente el Primer Mundo por él, en el infinito mundo).Dicen los periódicos (el suyo, por ejemplo) que se precisarían tres aviones Hércules diarios para cubrir la necesidad de suero para tratar a la población afectada, por el cólera en Ruanda, aparte de millones de litros de agua diarios. Me pregunto qué representan para el Primer Mundo tres aviones Hércules diarios. El, que no vaciló lo más mínimo al ver que Irak le tocaba el petróleo, en desplegar un contingente bélico sin precedentes después de la II Guerra Mundial. Si el Primer Mundo realmente se compadeciera y quisiera de verdad solucionar esta tragedia inmensa, creo que dispone de medios suficientes para hacerle frente. Pero como con toda contingencia que no pone en peligro sus intereses y su calidad de vida -a corto plazo- se muestra tacaño e indeciso.
Foros internacionales, consejos, Gobiernos,. instituciones, Primer Mundo todo póngase ya inmediatamente, generosamente, manos a la obra. No permitamos más en ninguna parte del mundo tanto sufrimiento e injusticia. Véanse los frutos de las colonizaciones.-
