Kraus asegura que en los macroconciertos no hay cultura

"No quiero opinar, es que ni media palabra", advirtió de entrada. Pero Alfredo Kraus no pudo contenerse y habló en el Palacio de Festivales sobre el reciente macroconcierto de Pavarotti, Domingo y Carreras, que congregó a más de 50.000 personas. "En esas concentraciones no hay música ni cultura verdaderas; aunque alguna vez participé en semejantes espectáculos, creo que son un mal reflejo de la vida actual".

El cantante lírico canario añadió que no es ético servirse de la música "para nuestros propios intereses. Si yo canto La donna e mobile con otros tenores no ayudo a la formación de la gente; en el mejor de los casos, se la deforma", declaró a la prensa aprovechando una tregua en sus clases.Kraus se encuentra en Santander dirigiendo un curso de técnica vocal en la Escuela Superior de Música Reina Sofía. Diez de sus alumnos, previamente seleccionados, tienen el rango de directos o activos, y el resto, hasta un centenar, son oyentes.

El maestro es severo, pero se muestra cortés y natural con sus alumnos, a quienes obliga a repetir y volver a repetir hasta la saciedad. "Todo artista debería vivir esta experiencia, porque existe un deber moral de enseñar. Creo que hacer esto es también arte", opina.

"El canto es el instrumento más dificil de cuantos existen, porque nosotros mismos somos el instrumento, pero la voz no se materializa como el sonido de una guitarra o un violín. Trabajamos con algo que ni vemos ni tocamos, así de dificil es cantar. El canto", advierte a unos alumnos expectantes, como si se enfrentaran a un examen final, "es un solo sonido desde que se inicia la frase hasta que termina".

El profesor no desprecia ningún detalle con los alumnos. En un momento advierte: "no debe aprenderse una serie de romanzas o de arias como el lorito, sin saber, porque aprender a expresarse luego costará al alumno un esfuerzo tremendo a lo largo de la carrera".