El cobro de entrada en los museos fue acogido con calma por el público

Para la mayoría de los españoles que ayer visitaron el Centro de Arte Reina Sofía y el Museo del Prado -los dos museos nacionales con más público- la crisis y la necesidad de obtener la mayor cantidad de fondos para la conservación del patrimonio artístico, son las razones fundamentales de la entrada en vigor del cobro en los museos nacionales. Una medida adoptada para homologar el trato los extranjeros de la Unión Europea y los españoles.

Los visitantes de ayer ligaban la medida a la crisis económica. Quizás sea ésa la razón por la que las 400 pesetas de la nueva tarifa no parecen afectar demasiado a quienes estos días recorren las salas: en su mayoría, turistas españoles.

En el Reina Sofía, los encargados de información atribuían la actitud positiva de la gente a la oleada de información recibida desde finales del año pasado, cuando la ministra de Cultura, Carmen Alborch, anunció en Bruselas que en 1994 se revocaría la decisión tomada en el último Consejo de Ministros de 1982, por la que españoles y extranjeros residentes accedían gratis a los museos públicos. "Ya desde hace días la gente nos preguntaba y estaba al tanto del asunto, así que no ha ocurrido nada especial" afirmaba ayer una de las encargadas de información del centro.

Carteles anunciadores

Anoche se cambiaron los carteles de entrada que anunciaban las diferentes tarifas para españoles, residentes y extranjeros, por los nuevos con el precio único. En los carteles se señalan las excepciones y los días en que los museos españoles son gratuitos para todo el mundo. "Como han puesto ese cartel tan grande, no ha habido problemas con los visitantes", afirmaba una de las porteras del Prado, a pesar de los dos españoles que, ante la sorpresa de tener que pagar su entrada, optaron por no entrar el museo."Soy española y mi acompañante es extranjera" apuntaba una señora, lista para pagar una sola entrada. La decepción vino acompañada de las ochocientas pesetas reglamentarias, y el comentario de "No estaba enterada porque vivo en Suecia. Ahora vendrá menos gente, aunque ésta sea una medida positiva para el museo. Yo creo que el arte y la cultura tienen que ser gratis".

La Dirección General de Bellas Artes y Archivos solicitó ayer a los museos estatales unificar sus criterios para eximir de pago a quienes se identifiquen (mediante la presentación de documentos) como miembros de los siguientes colectivos: profesionales de museos públicos, miembros de asociaciones nacionales e internacionales de museos artísticos, guías nacionales de turismo, miembros de asociaciones de artistas plásticos, periodistas en ejercicio y parados inscritos en el Instituto Nacional de Empleo. También se solicita que se reduzca en un 50% el precio para los miembros de patronatos.