Albons no ingresó en la GuardiaCivil

Bartolomé Albons Monserrat, uno de los detenidos en la Operación Pelícano, es antiguo confidente de la UCIFA (Unidad Central de Información Fiscal y Antidroga de la Guardia Civil) desmantelada hace un año por el juez Baltasar Garzón por desvío de droga intervenida.La remozada UCIFA que hoy dirige el coronel Antonio Blanes, libre de viejos y vidriosos compromisos, no ha tenido reparo en detener a quien podría aportar datos contra antiguos miembros de esta unidad, algo dificilmente realizable en la anterior etapa.

Según declaró el guardia de aquella unidad Doroteo Gómez Porras, días antes de una aprehensión de 562 kilos de cocaína, en 1988, Bartolomé Albons "estuvo en la jefatura del servicio fiscal. Tuvo una reunión con el coronel Arsenio Ayuso, y el teniente coronel Federico Quintero".

Existen sospechas de que la carga, "600 ovejas" según una grabación entre dos narcos, implicaría el desvío de la diferencia -38 kilos- para Albons.

En otra ocasión en que intervino Albons desapareció en Mallorca parte del alijo esperado. Un sargento, según este relato, "llegó a decir que antes que detuvieran a Albons prefería que se metiera en la Guardia Civil". El exconfidente ya está detenido, y no parece que haya solicitado el ingreso en el instituto armado.

Apenas dos años después de facilitar esa operación a la vieja UCIFA, en julio de 1990 Albons trasladó en su yate 1.200 kilos de hachís desde Marruecos a Barcelona, que, posteriormente, fueron conducidos en autobús hasta Brescia (Italia). Emilio di Giovine, destinatario de la mercancía, no halló ninguna diferencia de pesaje entre la mercancía comprada y la recibida.

Entre 1983 y 1993, Albons no sufrió ninguna imputación delictiva. En el último año, cuando se desmanteló la UCIFA, se le plantearon tres delitos de narcotráfico.