Primer acuerdo entre Gobierno y guerrilla en Guatemala
Las conversaciones de paz entre el Gobierno de Guatemala y la guerrilla de la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG) dieron en la noche del martes un paso de gigante después de que la delegación gubernamental aceptara la presencia de observadores de la ONU para supervisar la situación de los derechos humanos en el país. Ambas partes fijaron además un calendario de negociaciones que debería culminar en diciembre con la firma de la paz.Según este pacto, logrado tras cinco días de reuniones en la localidad mexicana de Puebla, una misión de derechos humanos de la ONU se establecerá en Guatemala con libertad absoluta de movimientos y podrá exigir información al Gobierno y a las Fuerzas Armadas. Con el acuerdo del martes se abren por fin las puertas a un proceso de pacificación para terminar con la guerra civil más larga de Centroamérica: 33 años de enfrentamientos armados han dejado en la historia de este país 110.000 muertos y 40.000 desaparecidos.
El capítulo de los derechos humanos se había convertido en el principal escollo de los contactos que Gobierno y guerrilla mantienen oficialmente desde abril de 1990. Guatemala figura, en los registros internacionales, en el pelotón de cabeza de los países donde las violaciones de los derechos humanos son sistemáticas. El antecedente más cercano de este acuerdo se encuentra en El Salvador, donde un pacto similar, firmado en junio de 1991, permitió la llegada de una misión de observadores de la ONU y fue el preámbulo de la firma de los acuerdos de paz.
Queda ahora por ver si el Gobierno guatemalteco acaba aceptando la pretensión de la URNG de que se cree una Comisión de la Verdad que, al igual que ha sucedido con su vecino salvadoreño, depure las responsabilidades de las violaciones más graves de los derechos humanos, a lo que el Ejército se opone con energía. El subsecretario general para asuntos políticos de la ONU, Marrack Goulding, expresó su satisfacción por lo que calificó de "primer acuerdo firmado en el proceso de paz" y anunció que las Naciones Unidas enviarán próximamente a un equipo que prepare el establecimiento de la misión de observadores.
Ambas partes lograron fijar además el calendario de las negociaciones de paz, que, en principio, deberían culminar en diciembre. En la agenda figuran, entre otros aspectos, las reformas constitucionales que permitan la democratización del país y el control del Ejército.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.