El Partido Popular no avalara recortes en el sistema público de pensiones

El Partido Popular advirtió ayer que no consentirá que la ponencia del Parlamento que estudia la reforma de las pensiones sea utilizada por el PSOE para convalidar recortes de las prestaciones, que cree ya tiene planeados junto a Convergéncia i Unió. En esa ponencia compareció ayer la ministra de Asuntos Sociales, Cristina Alberdi, quien abogó por aumentar la atención a la tercera edad en sus propios domicilios.

La representante del PP en la citada ponencia que estudia las futuras pensiones, Celia Villalobos, advirtió que su grupo no avalará los recortes sociales que, en su opinión, ya tienen planeados el partido socialista y CiU. "Hemos llegado a la ponencia con buena voluntad para analizar la actual situación de crisis del sistema y cómo resolver los problemas", dijo. "Pero no apoyaremos las conclusiones si el PSOE intenta utilizar la ponencia como coartada para validar una serie de medidas de recorte de pensiones ya anunciadas públicamente por el propio grupo socialista. No queremos ser instrumento de recorte de prestaciones", añadió.El ministro de Trabajo, José Antonio Griñán, en respuesta a una pregunta parlamentaria, dijo que la deuda pendiente de cobro de las empresas a la Seguridad Social supera los 500.000 millones de pesetas. Mientras, el déficit presupuestario del sistema público se situó en 229.000 millones de pesetas a finales de 1993. El ministro precisó que la situación patrimonial de la Seguridad Social arroja saldos positivos y comparó el déficit español con el de Alemania, que asciende a 1,4 billones, y el de Francia, situado en 1,5 billones, y de ahí deduce que "la Seguridad Social española está bastante más saneada". Griñán, tras concretar esas cifras, anunció que el Gobierno mejorará durante esta legislatura las pensiones de las viudas con bajos ingresos, sin empleo y sin otra prestación pública.

Los sindicatos lanzaron ayer sus críticas contra la proyectada reforma de las pensiones. CC OO hizo público un comunicado en el que rechaza la posibilidad de que se aumente el tiempo de cotización a la Seguridad Social para tener derecho a una pensión contributiva, "porque elevar el listón de los 15 años en un país paradigma de la eventualidad y la precariedad laboral será un duro golpe para numerosos colectivos sociales".

Cándido Méndez, candidato a suceder a Nicolás Redondo al frente de UGT, dijo en Toledo que las propuestas del Gobierno plantearán dificultades en el acceso a una pensión pública "suficiente y digna" y aseguró que la supervivencia del sistema de Seguridad Social está directamente relacionado con la política de empleo.

Por su parte, el secretario de Estado de Comercio, Apolonio Ruiz Ligero, se mostró partidario de sustituir cotizaciones sociales por IVA como medida para fomentar las exportaciones. No obstante, Ruiz Ligero matizó que la decisión de subir el IVA tropieza con el alto fraude fiscal y con la armonización con el resto de países de la Unión Europea. El vicepresidente de CEOE, Arturo Gil, que coincidió con Ruiz Ligero en la presentación de un libro del Instituto de Estudios Económicos, defendió igualmente esta medida.