Peres anuncia una pronta reanudación del diálogo de paz con la OLP

Los múltiples e intensos esfuerzos internacionales para salvar el proceso de paz en Oriente Próximo están aparentemente a punto de dar fruto. Las negociaciones entre Israel y sus vecinos árabes, incluyendo los palestinos de los territorios ocupados, podrían reanudarse durante la primera semana de abril en Washington, según dijo ayer el ministro israelí de Exteriores, Simón Peres.Las palabras de Peres constituyen la más reciente señal de que la misión israelí de alto nivel que sostiene contactos con el liderazgo de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en Túnez ha persuadido a su jefe, Yasir Arafat, para que retorne a la mesa de negociaciones y así continuar el diálogo interrumpido por la matanza de más de treinta palestinos a manos de un colono judío en Hebrón el 25 de febrero pasado.

El viceministro de Exteriores, Yosi Beilin, por su parte, declaró ayer que, si la OLP retorna a las negociaciones, el plan de autonomía para la banda de Gaza y la ciudad de Jericó -la primera fase del proyecto de paz en los territorios ocupados- podría entrar en vigor hacia el 13 de abril.

Las discusiones en Túnez, iniciadas el domingo por la noche, se desarrollan en un ámbito de máxima reserva. Dennis Ross, el coordinador del Departamento de Estado norteamericano, dio anoche por terminada su estancia en la capital tunecina, tras lo que fuentes diplomáticas describieron como una misión destinada a dar los últimos toques al acuerdo palestino-israelí.

Los principales puntos de conflicto que persisten se concentran en las demandas palestinas de la OLP de crear un mecanismo internacional para proteger a los palestinos de los territorios ocupados, el desmantelamiento de los asentamientos judíos de Hebrón y el desarme de los colonos.

Israel, por su parte, lo ha dicho hasta el cansancio. Los palestinos deben abandonar la idea de una fuerza multinacional. La presencia de observadores parece, pues, la opción más viable. Según fuentes palestinas, la delegación israelí ha propuesto la opción de una misión de la Cruz Roja en Hebrón para vigilar el cumplimiento de convenios internacionales que tienen que ver con la seguridad de poblaciones bajo una fuerza de ocupación.

Por otra parte, dos soldados israelíes murieron ayer en el sur del Líbano en una emboscada de activistas del Hezbolá contra un vehículo militar.

El Ejército israelí disparó en señal de represalia varios morteros contra territorio libanés, uno de los cuales alcanzo un autobús escolar. Una adolescente de 14 años resultó muerta y otras 22 heridas.