Un día de rosas

Ayer fue un día de rosas en Perfumes Puig, una de las primeras empresas de perfumería en España. Las 140 trabajadoras estaban eufóricas. Por fin, tras cinco años desde que presentaron la primera demanda, en 1989, se les reconocía el derecho a la equiparación salarial con sus sus compañeros de sexo masculino. "No hemos conseguido nada más que el reconocimiento de un derecho" decía una de las componente del comité del sindicato CC OO. Y el esfuerzo, tras cinco años "ha valido la pena" agregaba. Y llegó precisamente un un día significativo. "No cabemos de la alegría" explicaba una de ellas. "Pero lo más importante es que se nos ha reconocido un derecho, que se nos iguale con los hombres en sueldo aunque nosotras tenemos, de entrada, una categoría laboral superior".Porque ayer, pese a las cámaras, los fotógrafos y los micrófonos, se trabajó más que nunca en la compañía de la familia Puig, que fundó la empresa en 1914.

Una de las trabajadoras no podía contenerse. "Lo vamos a celebrar pero lo vamos a hacer trabajando todo lo que podamos". "Más que nunca" añadía.

En la factoría que a compañía de perfumes posee en el barrio del Besós, en la periferia barcelonesa, trabajan 450 personas. La dirección de la firma recibirá hoy a las 140 mujeres por primera. vez tras la sentencia fallada ayer por el Tribunal Constitucional.

"Esta situación, explica una componente del comité de empresa, afectaba a las mujeres que realizaban tareas de envasado. "Las que trabajabamos allí queríamos el mismo, sueldo que los hombres. Nosotras, que somos oficialas de primera, envasamos y los hombres, que son peones, realizan el transporte. Por eso creímos desde el principio que habíamos sido discrimanadas de forma injusta. Ahora, con esta sentencia, recuperaremos un sueldo que deberíamos haber percibido desde hace tiempo". "El Tribunal Constitucional nos ha devuelto al razón" decían.