Primeras aplicaciones del láser en hernias inguinales
El laser, hasta ahora utilizado eficazmente en cirugía para algunas intervenciones en dermatología y oftalmología, empieza a aplicarse para curar hernias inguinales. Su principal ventaja consiste en que no se requiere anestesia general, como ocurre con el método tradicional. Otro aspecto favorable es la carencia de dolor y la rápida recuperación del paciente, según el doctor Walid Honesch, quien, por primera vez en España, realiza este tipo de operaciones.Honesch presentó el resultado de sus investigaciones en el IV Congreso de la Sociedad Española de Láser Médico Quirúrgico, celebrado este fin de semana en Valencia.
Honesch, de origen sirio, pero establecido en Valencia desde hace 20 años, aplica en sus intervenciones la técnica de Shouldice, un hospital canadiense con sede en Toronto especializado en la curación de hernias.
Además de la novedad que supone la operación quirúrgica con láser, este cirujano aplica la crioterapia, que en este caso consiste en congelar el nervio abdominogenital menor con el objetivo de evitar el dolor durante el periodo posoperatorio. Este tipo de intervención quirúrgica no requiere ingresar en un hospital, que con el método habitual se prolonga hasta ocho días.
"El enfermo no padece el riesgo que siempre supone una anestesia general, no sufre ningún dolor, y la posibilidad de que se reproduzca la hernia se reduce a un 0,8%, frente al 15% que se registra con la cirugía tradicional", destaca Honesch.
Ahora, una operación de hernia inguinal cuesta unas 400.000 pesetas. Con la aplicación del láser, baja a la mitad.
