La "Heroica" de Muti

Tiene Riccardo Muti ideas y palabras propias para la Sinfonía heroica, sin traicionar ni apoderarse del texto beethoveniano. Pero, en la música, como en el lenguaje, existe el acento, y el de Riccardo Muti es por naturaleza latino. Quiere decirse que apura valores que toda música precisa: claridad, buena continuidad que incluye una mesurada dosis de flexibilidad a fin de que la música no se deshumanice y el pulso no se convierta en metro.Lo más acusado en Muti quizá resida en una innata voluntad de cantar y de hacerlo según las tradiciones italianas: en un estilo vocal que conduce y mantiene las tensiones dramáticas. Fuertes son en la Sinfonía en mi bemol que, en la diversidad de su juego contrastante, se integra en un total artístico sensible, comunicativo y de una energía vital irresistible.

Antes, los filarmónicos de Milán sirvieron una excelentemente explicada versión de las Dos imágenes, de Bartok, de 1910, tan seguras de trazo e inteligentes en el tratamiento orquestal de las tradiciones populares, como escasamente premonitorias de lo que iba a ser el genio y el vigoroso perfil de tan singular creador. El éxito fue más que caluroso y Riccardo Muti devolvió la luminosidad que había oscurecido la calima del desierto a su paso por la isla canaria.