Tropas españolas trasladan los restos de los periodistas muertos en Mostar

Los cadáveres de los tres periodistas italianos muertos el viernes en Mostar al ser alcanzados por una granada croata cuando se disponían a filmar a los niños sin familia que se hallan en el hospital del sector oriental de la ciudad, fueron recuperados ayer por los cascos azules españoles y llegaron por la noche a Trieste en un avión del Ejército italiano.Según declaraciones a la televisión pública italiana, el teniente coronel Castro, portavoz de la Agrupación Madrid en Bosnia, explicó que vehículos españoles condujeron los cuerpos de Marco Luchetta, Alessandro Ota y Darío D'Angelo hasta un destacamento de los cascos azules españoles en Dracevo, desde donde salieron hacia Split en furgones proporcionados por el consulado italiano.

El Ministerio de Defensa de la autoproclamada República Croata de Herzegovina admitió indirectamente que fue su artillería la que alcanzó al equipo de la televisión italiana. Por su parte, el presidente de dicha república, Maite Boban, expresó anoche su condolencia a su homólogo italiano, Oscar Luigi Scalfaro, mientras el Ministro de Asuntos Exteriores de Roma, Beniamino Andreatta, exigía la apertura de una investigación oficial por parte de las autoridades croatas. También el comandante de las fuerzas de la ONU en la ex Yugoslavia, el general Jean Cot, condenó ayer, con una contundencia sin precedente, la actitud de los croatas en Mostar.

Por otra parte, las autoridades musulmanas de Bosnia anunciaron ayer la detención de cuatro personas acusadas de haber participado, la víspera, en el asesinato a sangre fría de un ciudadano británico que participaba en una operación de suministro de ayuda humanitaria en Zenica, en Bosnia central. Este crimen había provocado una fuerte indignación en el Gobierno británico, que había exigido una acción inmediata de parte de las autoridades bosnias.