El Gobierno alemán da por cerrada la crisis y prevé un crecimiento del 0,5%
El Gobierno alemán da por cerrada la crisis económica de los noventa. En su informe anual, que será publicado la próxima semana, el Ejecutivo presidido por Helmut Kohl se muestra optimista y asegura que su previsión es respaldada por el Bundesbank. Los cálculos del Gobierno federal alemán cifran ese crecimiento en un 0,5% del producto interior bruto en la mitad occidental del país, y entre un 6% y un 8% en los Estados de la antigua República Democrática Alemana.
El gabinete económico (integrado por 10 de los 19 ministros del Gobierno) y el presidente del Bundesbank, Hans Tietmeyer, analizaron ayer, en Bonn, el informe preliminar y según el portavoz del Ejecutivo, Dieter Vogel, coinciden en que, tras la crisis de 1993 en el año 1994 volverá a registrarse un crecimiento de la economía.El Gobierno alemán fundamenta su optimismo en la previsión de que van a mejorar las exportaciones, lo que conduciría a una recuperación generalizada y a un aumento de las inversiones. Tras caer el 11% las exportaciones en 1993, el equipo económico de Helmut Kohl considera que, en 1994, las ventas al exterior crecerán entre el 3% y el 4%.
El ministro federal de Economía, Günter Rexrodt, aseguró en la reunión del gabinete económico que "la situación de partida para el desarrollo económico, en 1994, es relativamente favorable". Sin embargo, el ministro tuvo que reconocer que los llamados nuevos Estados del Este aún no pueden adquirir, por sí mismos, el impulso necesario para crecer.
El Bundesbank, según el portavoz del Gobierno, está completamente de acuerdo en las líneas generales del informe del Ejecutivo. Esa coincidencia es aún más manifiesta, según el portavoz, "en el rechazo de un descenso a la fuerza de los tipos de interés o en una política de depreciación [del marco]".
La satisfacción del Gobierno alemán no puede hacerse, sin embargo, extensiva al mercado laboral. El informe contempla un nuevo aumento del desempleo en 1994. Sólo en Alemania occidental se registrarán, en el transcurso del año, 450.000 nuevos parados. Junto a las nuevas inversiones el Gobierno Kohl considera necesaria una estricta política de moderación salarial, para poder crear empleo.
Dispuesto a sentar un precedente, el canciller Kohl ha jugado innumerables bazas para intentar una congelación de sueldos en la negociación del convenio del sector público, que comenzó ayer viernes en Stuttgart. En la primera jornada, la parte empresarial ha propuesto incluso una reducción de los salarios, que no llegó a cuantificar. El Sindicato de Trabajadores Públicos (óTV), que representa a los 3,5 millones de afectados por el convenio, ha calificado la propuesta como "poco seria" y ha exigido una subida salarial del 4%.
Un 10% de pobreza
Por otro lado, ayer se conoció el primer informe global elaborado por la Confederación de Sindicatos Alemanes (DGB) y la asociación de organizaciones benéficas, según el cual, uno de cada 10 alemanes vive en condiciones de pobreza. El informe considera que el nivel de pobreza se sitúa en el 50% de los ingresos medios de una familia. Atendiendo a esta fórmula y con las cifras de 1992, el umbral se situaría en 1.708 marcos mensuales (aproximadamente 136.000 pesetas), en el oeste del país, y 1.246 marcos (unas 107.000 pesetas) en el es te.En base a esos criterios, el número de pobres en Alemania sería de 7.250.000 (de ellos, 4,65 millones en el oeste y 2,6 millones en el este). La cifra representante todos modos, una disminución sobre estimaciones anteriores. Se calcula que en el oeste el número de pobres se mantiene constante en los últimos años, en torno al 7,5% de la población, y que en el este, en el último año, ha disminuido de un 16,2% a un 14,8%.
El informe considera especialmente significativo que la pobreza parece haberse enquistado en determinados grupos de población, como el de las madres solteras o las familias numerosas. También señala que la pobreza y el desempleo son el caldo de cultivo de conductas radicales, que los políticos no pueden pasar por, alto durante mucho más tiempo".
En el apartado dedicado a los extranjeros, el informe señala que se observa "un gran potencial de pobreza". Un 16,7% de los inmigrantes tiene unos ingresos muy bajos.
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