Tierra y libertad

El Ejército Zapatista ha heredado de la guerra de su prócer algo más que el nombre y la voz de levantamiento: "¡Tierra y libertad!". Ha heredado una situación de injusticia social, si acaso más sangrante, por ser más vieja y más conocida. Las acciones bélicas que están teniendo lugar en México, totalmente previsibles, son sólo un pequeño ejemplo de lo que puede pasar si la población de gran parte, de Latinoamérica, o de otras tantas zonas del mundo, llega a cansarse de aceptar lo que no puede cambiar, y decide cambiar lo que no pueden soportar.Y realmente sus condiciones de vida no son soportables. Las injusticias que se cometen contra ellos, de forma totalmente consciente, y con un objetivo único (dinero-poder), son bien conocidas por todos aquellos que quieran enterarse. Conozco de cerca la situación en la que viven los indígenas centroamericanos. La pobreza brutal y la injusticia social que soportan llega a límites que difícilmente podemos sentir desde nuestros países desarrollados. Pero lo malo de esto es lo que conocemos desde la televisión vemos morir a los niños y matarse a los mexicanos sin tierra ni futuro. Y es malo porque entre todos dejamos que las cosas sigan así, sin levantar las cargas económicas que exprimen a estas sociedades ni criticar las actitudes políticas que impiden cualquier mejora social o política.

Todos sabemos qué es lo que está ocurriendo, por qué luchan -ahora- estas personas (mañana serán otras), sabemos que cuando los zapatistas dicen que luchan porque "les empuja el hambre y la miseria" (sic) es cierto. Y además sabemos que tienen poco que perder en esa lucha, tan sólo su vida; y nosotros ya hemos demostrado cuál es el valor que tienen las vidas de "esas otras personas": ninguno.-