Arafat califica de "chantaje" la oferta de Israel para aplicar el plan de paz

El líder palestino, Yasir Arafat, manifestó ayer en Túnez que las condiciones de Israel para aplicar el plan de paz son un "chantaje inaceptable". Estas declaraciones fueron realizadas ante el Comité Ejecutivo de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP). Arafat afrontó ayer nuevas disidencias internas. Un grupo de personalidades reformistas ha pedido una mayor democratización y una dirección colegiada en la central palestina.

El bloqueo de las negociaciones de paz y la rebelión de los sectores más radicales colocan a Arafat ante crecientes dificultades para imponer su liderazgo. Varios intelectuales han criticado el personalismo de Arafat y su alejamiento de los problemas de los territorios ocupados.En un confuso tira y afloja, el ministro israelí de Exteriores, Simón Peres, señaló ayer en Jerusalén que no se dan las condiciones para una reanudación de las negociaciones con los palestinos. Mientras Israel mantiene que Peres y Mahmud Abas, en nombre de la OLP, pactaron unos puntos en El Cairo, los palestinos sostienen que no hubo tal acuerdo.

Egipto salió ayer en defensa de los argumentos palestinos y su ministro de Asuntos Exteriores, Amr Musa, indicó que los contactos entre las dos partes en El Cairo habían derivado en propuestas, pero nunca en acuerdos.

Nuevos frentes

La OLP intenta abrir nuevos frentes diplomáticos y una delegación palestina acudirá en las próximas horas a Ammán, la capital de Jordania, para celebrar conversaciones sobre la coordinación del proceso de paz. El rey Hussein lanzó un ultimátum la pasada semana a Arafat para que se discutiera la colaboración entre jordanos y palestinos en el plazo más breve posible.El control de las fronteras de los futuros territorios de la autonomía palestina, Gaza y Jericó, con Egipto y Jordania es uno de los principales escollos del plan de paz. Sin embargo, los expertos económicos de ambas partes reanudaron ayer conversaciones en París para sentar las bases de la futura cooperación para el desarrollo de los territorios ocupados.

Entretanto la violencia no cesa. Ayer se desató en el campo de refugiados de Shati, en la franja de Gaza, donde el Ejército israelí disolvió a tiros una manifestación palestina. Tres jóvenes murieron por disparos de los militares hebreos, según fuentes palestinas.