El Ayuntamiento cede a la Fundación Antisida un edificio que no es suyo

La Fundación Antisida (FASE) okupa desde ayer un coqueto hotelito granate frente a la Asamblea Suprema de la Cruz Roja Española, en la calle de Juan Montalvo (Moncloa). El Ayuntamiento de Madrid cedió ese local a pesar de que el Ministerio de Educación avisó de que el edificio es suyo y lo ha cedido a la Comunidad de Madrid para formación de adultos. Pero el municipio ha prestado oídos sordos y ayer, Día Mundial del Sida, inauguró la nueva sede.

"Esto es increíble", exclamó la directora general de Educación de la Comunidad de Madrid, Aurora Díez, al enterarse por este periódico de que ayer mismo se estaba inaugurando la sede de la FASE en el mismo sitio donde su departamento pretendía ubicar un nuevo centro de formación de adultos que daría servicio a unas 1.000 personas."El 20 de abril recibimos una carta del ministerio en la que se nos concedía ese centro", explica, "pero cuando fuimos a empezar las obras de acondicionamiento nos encontramos con que el Ayuntamiento había cambiado la cerradura". Al mes siguiente (el 11 de mayo), el concejal de personal, Antonio Moreno, cedió por decreto el edificio a la Fundación Antisida de España.

Díez señala que avisó del problema al concejal del distrito de Moncloa, Luis Molina, quien no le ofreció una explicación satisfactoria. Molina no respondió ayer a las llamadas de este diario. La directora de Educación reitera que el Ayuntamiento sabía que el edificio no es suyo.

La Comunidad tenía un presupuesto para pintar el antiguo colegio Residencia y arreglar la calefacción. Tenía previsto iniciar la actividad de ese centro el pasado septiembre, pero decidieron posponer un año su apertura en vista de los problemas surgidos. "Pero ahora no sé qué va a pasar", concluye. En ese edificio querían instalar también una oficina de atención a inmigrantes para ayudar a su integración.

El texto que no aparece

El Ayuntamiento arguye que todos los colegios que se cierran por falta de niños pasan automáticamente a propiedad municipal en aplicación de la legislación. Según la información facilitada por el Ayuntamiento, el Boletín Oficial del Estado del 30 de mayo de 1990 informaba que el colegio quedaba libre y abría así la vía para que pasase a propiedad municipal.Sin embargo, el asesor del concejal de personal que atendió la consulta no aclaró qué texto avala esa tesis.

Educación niega que exista tal norma y señala que si un centro se cierra tienen que destinarse a otra actividad educativa. "El edificio forma parte del Patrimonio del Estado a nombre del Ministerio de Educación", afirman fuentes de esa institución.

De hecho, el edificio consta a nombre del ministerio en el Registro de la Propiedad número 26 de Madrid. El Ayuntamiento replica a este hecho que le corresponde al ministerio cambiar la titularidad del inmueble.

"Le hemos remitido una carta al concejal de Moncloa y estamos esperando contestación", señalan fuentes del ministerio, que no saben precisar en qué fecha enviaron el escrito.

El concejal de educación, José Gabriel Astudillo, dice que si el Ayuntamiento tenía llaves del colegio se debe a que es suyo. "No creo que haya tanto problema cuando hoy ha estado la ministra de Asuntos Sociales en la inauguración", añade.

Mapa educativo

Al acto también asistió la infanta Elena y el alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano. "El ministerio puede decir lo que quiera, pero es del Ayuntamiento", sentencia el regidor de Madrid.Astudillo añade que el Ayuntamiento ha cedido tres centros al ministerio y que lleva mucho tiempo pidiendo un mapa educativo de Madrid, pero no conoce en detalle la situación de ese centro. Aclara que en ese antiguo colegio -cerrado por falta de niños- no se desarrollaba ninguna actividad.

El vocal socialista del distrito Rafael González dice que hay otros edificios en la zona que sí son propiedad municipal y que se podrían haber cedido a la Fundación Antisida. "La Casa del Escudo [en la calle de Francos Rodríguez] está cerrada hace un año", añade González.

"El Ayuntamiento ha okupado el centro", afirma; "le pregunté en un pleno hace casi seis meses al concejal Molina qué pasaba con el edificio y me contestó el 21 de octubre". La contestación de Molina se limita a señalar que el edificio es de propiedad municipal y se ha cedido a la Fundación Antisida. "El concejal del distrito", concluye González, "tiene la máxima información sobre qué edificios son del Ayuntamiento y cuáles no".